Al conseguir un premio Oscar a Mejor Película, el 27 de febrero Moonlight hacía historia por partida doble. Por una parte, se convertía en el primer filme afroamericano en ganar el máximo reconocimiento de la industria cinematográfica hollywoodiense; y por otra, en la primera película con temática LGTB en conseguirlo.
Por encima de estos dos méritos adyacentes, y preferencias personales a un lado, Moonlight es una película excelente. Nadie está nominado a un premio de estas características, y menos aún lo gana, porque sí.
Sin embargo, el cantante de fados portugués João Braga (71) ha decidido cuestionar la honestidad de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas estadounidesne escribiendo en su página de Facebook lo siguiente: “Ahora basta ser negro o gay para ganar un Oscar”.
La irreverente afirmación ha recibido multitud de comentarios críticos contra Braga, e incluso la Asociación SOS Racismo la ha denunciado por “evidentes muestras de xenofobia”. Pese a todo, no se puede decir que el revuelo organizado haya hecho reflexionar al cantante. “No sabía que era ofensivo llamar negro a un negro o gay a un gay”, ha replicado el veterano artista echando balones fuera y volviendo a hacer gala de su poco tino.
João Braga no tiene pensado recular porque, según él, “se ha sacado de contexto. Yo no soy homófobo ni racista”. Y para demostrarlo, corona su discurso con una versión del clásico y socorrido ‘tengo muchos amigos gays’, cómo no: “Tengo grandes amigos de todas las opciones sexuales y no quise ofender a nadie”. ¿Lo aceptamos como disculpa?