Se acabaron las discusiones sobre lo que debe sonar en un bar, ese “yo ahí no entro porque no soporto la música” o las desairadas peticiones a un DJ que jamás te hará caso. Antes, para escuchar tu canción favorita tenías que exponer tu chorro de voz en un karaoke de mala muerte. Pero ahora, gracias a la app Jukmob, el cliente tiene el poder de elegir qué se escucha en los lugares de ocio. Y sin forzar la garganta.
Se trata del primer reproductor de música totalmente legal para lugares privados, cuyo objetivo es que el público lo pase bien. Y nada mejor que otorgarle el mando democrático de la playlist: todos los usuarios podrán votar por su canción y la mayoría decidirá cuál es la siguiente en escucharse. Ya sea en un restaurante, centro comercial, gimnasio o el propio bar, basta que haya altavoces para recuperar el espíritu de la clásica Jukebox, que reproducía la canción elegida por la persona que echara una moneda.
Su funcionamiento es muy sencillo, y en su página web encontrarás más detalles sobre ella. Además, está disponible para los sistemas operativos Android e iOs. Y ya puestos a no meter el móvil en el bolsillo durante toda la noche, hagámoslo por una buena causa. ¡Ya no hará falta taparse los oídos!