Taiwán se convierte en el primer país de Asia donde dos personas del mismo sexo pueden contraer matrimonio. La Corte Suprema de Justicia de la isla asiática ha declarado inconstitucional la restricción del matrimonio a uniones heterosexuales y exigió la legalización del matrimonio homosexual.
Al conocer la decisión, el activista Chi Chia-Wei y el gobierno municipal de Taipéi declararon que es “un sueño hecho realidad que llevamos esperando más de 16 años”. Numerosos grupos a favor del matrimonio homosexual en Asia celebraron también la sentencia. La historia de Chi es todo un ejemplo de valentía, pues en 1986 se declaró públicamente homosexual, algo totalmente inconcebible para la época. Esto le costó al activista 162 días de cárcel. Chi lleva luchando de forma incansable desde entonces, pues hace 16 años ya desafió las leyes taiwanesas al pedir, sin éxito alguno, el registro legal con su pareja. El taiwanés volvió a intentarlo en el año 2015, pero la respuesta fue la misma.
Esta medida ha provocado tantas reacciones a favor como en contra, pues grupos religiosos y conservadores como la Alianza de los Grupos Religiosos de Taiwán han pedido que la cuestión se someta a referéndum, ya que esta sentencia atenta contra la tradición asiática.