El crimen más porno de la historia
Si hay algo que interese más que los asesinatos eso es el sexo, y en nuestra primera historia combinamos ambos para hablarte del crimen que hace algo más de una década hizo temblar los pilares de la industria del porno.
Bryan Kocis era uno de los productores más poderosos de porno gay underground de Estados Unidos. Estaba especializado en rodar cintas de bajo presupuesto con actores jóvenes que accedían a mantener relaciones sin preservativo.
Amado y odiado a partes iguales, Kocis contaba con muchos enemigos en la industria; aun así, su éxito iba en aumento y sus vídeos recibían las mejores de las críticas. Pero el destino que la vida le tenía preparado al propietario de Cobra Video era fatal.
Corría un 24 de enero de 2007 cuando los bomberos llegaban a la gigantesca mansión de Pensylvania propiedad del productor con el fin de sofocar un incendio del que habían sido avisados. La situación se imaginaba crítica y era de esperar un fatídico final. Pero nadie podía imaginar que tras los muros de la gigantesca mansión se encontraría el degollado y casi irreconocible cadáver de Bryan Kocis, con más de 28 puñaladas.
En mayo de 2007, Harlow Cuadra y su entonces pareja, Joseph Kerekes, actores rivales de Cobra Video en la industria del porno, eran arrestados y acusados del asesinato de Bryan Kocis. Finalmente, fueron condenados a cadena perpetua por homicidio en primer grado.
El motivo del asesinato, según afirmaba la policía en su momento, habría sido una disputa por poder contar con Sean Lockhart (conocido como Brent Corrigan en el mundo del porno) en una película. La disputa en cuestión enfrentaba a Kocis con Cuadra, quien, ayudado por Joseph Kerekes, su pareja del momento, acabó con la vida de Bryan Kocis.
Asesinado por tu amor platónico
Corría 1995 cuando Scott Amedure, un hombre gay de 32 años, decidió confesar su amor hacia su amor platónico, John Schmitz, en la televisión pública.
The Jenny Jones Show fue el programa elegido por Amedure para declararse a su vecino y compartir con él sus fantasías sexuales. Estaba completamente enamorado desde hacía meses, y se había llegado a gastar 300 dólares en ropa para impresionarle.
Llegó el momento de la verdad, y el 6 de marzo de 1995 Amedure le confesó a Schmitz su amor en la pequeña pantalla. “Vale, pero yo soy heterosexual, no estoy interesado”, respondió su vecino.
Tres días después, Scott Amedure fue encontrado muerto en su cocina con dos heridas de bala en el pecho. ¿El responsable? John Schmitz.
“Me sentí humillado en The Jenny Jones Show. Me jodió en la televisión nacional”, declaraba un John Schmitz que tras encontrar en su apartamento una nota anónima de connotaciones románticas y asumir que era de Amedure decidió comprar un arma y cinco balas, con las que mató a Scott Amedure.
El programa no se llegó a emitir y fueron muchos los que exigieron responsabilidades al talk show, aunque finalmente se filtró la grabación, la cual te animamos a ver pinchando en el vídeo.
Horror en Versace
El crimen que cambió la industria de la moda fue el asesinato de Gianni Versace, que aun a día de hoy afecta al control de la firma; su móvil sigue siendo una incógnita.
Gianni Versace, abiertamente homosexual, volvía por el paseo de Ocean Drive a su mansión de Miami Beach un 15 de julio de 1997 cuando fue disparado a quemarropa por Andrew Cunanan. El asesino en cuestión era perseguido por otros cuatro delincuentes y se dedicaba al trabajo sexual.
Pero, ¿qué hay detrás del asesinato del gran Versace?
En un primer momento se pensó que el asesinato podría haber sido un intento fallido de robo, pero una vez se conoció la identidad del asaltante se descartó la hipótesis.
Fue encontrada una paloma muerta junto al cadáver del diseñador, lo cual hizo también pensar en un posible ajuste de cuentas con la mafia, y por tanto Cunanan sería un asesino a sueldo. Además, Giuseppe Di Bella, ex miembro de la mafia calabresa, declaró que el asesinato había sido cosa dePaolo de Stefano, con quien Versace tenía deudas.
Otras teorías apuntan a una posible venganza por parte de Cunanan, enfermo de sida, con quien según las malas lenguas Gianni había mantenido relaciones de carácter sexual. Según esta teoría, al enterarse de su enfermedad habría querido vengarse de toda pareja sexual que hubiera tenido, lo cual explicaría, además de la muerte de Gianni, las de Trail, Manson y Miglin (otros de los compañeos sexuales de Cunanan que fueron también asesinados).
Sin embargo, lo más probable es que nunca conozcamos el móvil del asesinato porque Cunanan se suicidó a la edad de 27 años mientras estaba siendo buscado por la policía.