La homosexualidad a lo largo de la Historia: la Prehistoria

La sociedad a lo largo de la historia ha ido obedeciendo los estándares de la cultura dominante del momento. Y en el caso de Occidente, durante dos mil años estos estándares han estado marcados por la tradición judeocristiana. Es por esto que algunas prácticas de periodos anteriores a la creación de estas tradiciones han llegado incluso a ser ocultadas en cierta medida.

Esto es lo que ocurre con la Prehistoria, además de la difícil tarea que supone la investigación de este periodo, la Prehistoria ha estado sometida al estigma implantado en el Siglo XIX que supone de manera dogmática que el sexo ‘en las cavernas’ tenía como fin único  la reproducción. Además, hasta hace pocas décadas (e incluso nos atreveríamos a afirmar años) el sexo ha sido tratado como tema tabú social e institucionalmente, por lo que la mayoría de los estudios sobre este periodo no se centran, e incluso ignoran por lo general las prácticas sexuales, y más aún las homosexuales.

Las bailarinas

Representación encontrada en Sueca, datada del 5.000 a.C

Como ya hemos comentado, esta suposición nace de la concepción que históricamente se ha tenido de la homosexualidad, que como todos sabemos va muy ligada a religiones como el Cristianismo, que históricamente la ha condenado.

Es por ello que aunque tradicionalmente se haya ignorado la existencia de prácticas homosexuales en la Antigüedad, podemos afirmar que existían con bastante frecuencia. El sexo en la Prehistoria difiere bastante de lo que afirmaban los estudiosos del Siglo XIX, investigaciones recientes afirman que las prácticas sexuales estaban motivadas más por placer instantáneo que por reproducción, ya que por lo general, no se tenía clara la relación entre nacimiento de un bebé y el sexo. La consecuencia más directa de esta situación es una concepción del sexo muy alejada de la que a día de hoy a priori podríamos suponer, el ser humano prehistórico disfrutaba del sexo sin escrúpulos independientemente del género de su compañero (aunque suponemos que también debían existir chulazos prehistóricos).

Doble falo de Gorge d’Enfer, juguete erótico de la época

Son numerosas las evidencias que apoyan la teoría de que las prácticas homosexuales estaban más aceptadas de lo que se podría llegar a pensar, aunque, lógicamente, a lo largo de la Historia, hayan estado sometidas a las condiciones concretas de cada periodo o cultura y, por ello, muchas veces obviadas o censuradas.