Hace diez meses, el barcelonés Borja Matheu decidió hacer las maletas y mudarse a Ámsterdam. “El motivo fue una mezcla entre trabajo y querer volver a vivir fuera de España”. Una decisión que tomó después de dar la vuelta al mundo para grabar la primera temporada de The Gay Explorer, una serie documental que puede verse en YouTube donde plasma la realidad del colectivo LGTBI en 30 países diferentes. “Estos últimos meses he trabajado para financiar el proyecto y grabar la segunda temporada, que se estrena el 10 de octubre”.
Aunque estudió dirección hotelera, ha sido en el departamento de marketing de la empresa Booking donde ha estado trabajando a la vez que avanzaba con su webserie. Un puesto de trabajo en el que nunca ha tenido ningún problema por ser abiertamente gay. “Hay una comunidad LGTBI+ en la empresa, grupos de apoyo, eventos mensuales… Y ahora mismo estoy involucrado en varios proyectos para apostar más por la inclusividad en la empresa, tanto para los empleados como para los viajeros que utilicen la plataforma”.
Este es un pequeño ejemplo de la apertura del primer país en aprobar el matrimonio homosexual, en 2001. “El contraste de la aceptación que se vive en Ámsterdam, comparada con la de otros países, es lo que me impulsa a seguir haciendo nuevos episodios de The Gay Explorer”. Una brecha que se acorta si nos fijamos en nuestro país. “En España tenemos muchos derechos, oportunidades y mayor seguridad que en otros países del mundo.
“El Orgullo de Ámsterdam dura una semana entera. Empieza con un ‘Pride Walk’, un paseo con pancartas reivindicativas que suele ser muy emotivo, y acaba con un gran desfile por los canales de la capital”.
Aunque la situación política actual está lamentablemente dando algunos pasos hacia atrás. Confío en que cambie pronto”. Aun así, Borja sí encuentra pequeñas diferencias entre España y los Países Bajos. “Ámsterdam goza de una gran escena queer que en nuestro país no se percibe tanto. Se manifiesta mucho el mensaje de ‘exprésate y sé tú mismo, nadie te define, solo tú’. De hecho, uno de los festivales queer más grandes es Milkshake.
Fui por primera vez este año, y se lo recomiendo a todo el mundo”. Esta es una de las mayores fiestas LGTBI de Ámsterdam junto a su Pride. “La primera vez que fui al Orgullo fue en 2015, y me sigue pareciendo el más bonito del mundo. Es uno de los grandes eventos del país donde todo el mundo se une para celebrar la diversidad y la inclusividad”. Otro elemento que lo hace muy especial es que no salen carrozas… “Los canales se llenan de barcos y la gente celebra alrededor. ¡Es precioso!”.
Gracias a esos canales llaman a esta capital la Venecia del norte. Se han convertido en uno de sus sellos de identidad, así como sus famosas bicicletas. “Es como si no hubiese otro medio de transporte. Las hay por todos lados, en la calle, aparcadas, en las aceras… A día de hoy, he cogido la bici en días soleados, nevando, lloviendo, granizando y con vientos tan fuertes que me empujaban al suelo”.
Ante tales riesgos, Borja advierte: “Puede llegar a ser peligroso, sobre todo porque nadie lleva casco”. Precisamente, el clima es uno de los hándicaps de la ciudad. “Puede diluviar por la mañana y salir el sol al cabo de unas horas”. Aunque la lluvia nunca impide el salir a dar una vuelta por la noche, cuando es imprescindible ir a la calle gay, “la Reguliersdwarsstraat.
Aunque también hay otras zonas con bares, discotecas, saunas, cruising bars, sex clubs… Para todos los gustos y personas”. Todo bajo la supervisión del Nachtburgemeester, “que se podría traducir como ‘alcalde de noche’. Al igual que tienen una alcaldesa durante el día, esta persona se encarga de que exista diversidad y oferta de ocio en diferentes zonas, que la noche sea segura para todas las personas y se mantenga la ciudad limpia y cuidada”.
Un ejemplo más de la preocupación de los amsterdameses por el bienestar de su gente, y de aquellos que escogen sus calles como su nuevo hogar. “Es un país que te da la bienvenida con los brazos abiertos, donde puedes conocer a gente de cualquier parte del mundo”.
“En la ciudad se pueden hacer muchos planes, desde estar tirado en el parque tomando el sol con amigos a dar una vuelta en barco”.
Los imprescindibles de Borja
Vondelpark
Borja recomienda visitar este gran parque situado en el centro de la ciudad donde incluso hay gente montando a caballo, según nos cuenta. “Yo suelo venir con amigos a relajarnos y tomar el sol, cuando se puede, claro”.
Jordaan
“Es un barrio lleno de tiendas indies y con algunos de los mejores restaurantes de Ámsterdam. En él se encuentra el Homomonument, un monumento que homenajea a las personas perseguidas por su sexualidad”.
ReguliersdwarsstraaT
“La calle gay por excelencia. Recomiendo ir de bar en bar y acabar en NYX, una discoteca de varios pisos con todo tipo de música, y donde hasta el baño cuenta con su propio DJ y una pista de baile”.
NDSM
“Esta zona, a la que se llega en un ferry gratuito, tiene un estilo industrial y siempre sorprende con eventos y festivales de entrada libre. Además, al estar al lado del canal, puedes aprovechar para bañarte y tomar el sol”.
Amsterdam Pride y Milkshake
“Por favor, venid tanto al Orgullo de Ámsterdam como al Milkshake Festival”, nos pide Borja. “Son dos experiencias únicas y llenas de felicidad que nadie se debería perder”.