Invisible. Así es la violencia entre parejas del mismo sexo en España. Cuando un miembro de una pareja gay es maltratado, ¿qué ocurre? De hecho, la terminología es tan confusa que la violencia de género alude al hecho de maltratar a una mujer por el factor de vulnerabilidad que tiene con respecto al hombre.
Así, la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, reguladora desde tipo de situaciones en nuestro país, tiene por objeto “actuar contra la violencia que, como manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres, se ejerce sobre éstas por parte de quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad”. Pero, ¿y si esto ocurre en un una pareja gay?
Es lo que se preguntaba Nacho, una de las primeras personas que han denunciado al que era su marido por un caso de violencia entre personas del mismo sexo. Según cuenta al diario El Mundo, “durante siete años sufrí maltrato físico y psicológico por parte del que entonces era mi marido: humillaciones, vejaciones y agresiones. Me mató la autoestima». Tras contactar con su abogada, esta tuvo que enfocar el caso como si se tratase de violencia de género, redactándolo en femenino. Una multa de 150 euros, trabajos sociales y una orden de alejamiento le dieron la razón, tras un acuerdo que evitó una sentencia en firme.
Las asociaciones LGTB llevan tiempo remando para que este tipo de actuaciones se tengan en cuenta y se modifique la ley, pero el gran problema está en la concienciación de las administraciones. Hartos de contar casos de homofobia como el último que descubrimos en Jaén, en este campo también queda mucho trabajo por hacer.