Jamaica, ese lugar donde se apedrea inocentes a grito de ‘maricón, debes morir’, recibía a Barack Obama con cielo despejado y ni rastro de nubes. Pero un momento, un arcoíris surca el horizonte, no sabemos si como reivindicación gay en un país donde la homofobia está a la orden del día.
Y allí estaba el presidente de Estados Unidos, de sobra conocido por sus guiños a la comunidad LGTB, para extender su brazo y convertir un saludo normal en una caricia al icono gay multicolor por antonomasia. La fotografía, por supuesto, ya circula por las redes como un vehículo de alta velocidad.
Además, la imagen está captada por el fotógrafo oficial de la Casa Blanca Pete Souza, y fue utilizada como “foto del día” en las cuentas oficiales de la White House acompañada de la frase «con trabajo duro y esperanza, el cambio siempre podrá conseguirse». Casualidades en esta vida, muy pocas…