La mítica maison fundada por el español Cristóbal Balenciaga ha hecho un adelanto de su nueva campaña para la siguiente temporada. Este otoño/invierno, las supermodelos Lara Stone y Kate Moss son las protagonistas de las fotografías, tomadas por el veterano Steven Klein. Las imágenes, sensuales y enigmáticas representan “a Kate y Lara manteniendo una misteriosa conversación”, según Alexander Wang, director creativo de la marca desde 2012.
“Para mí, la colección de otoño comenzó con las mujeres reales de Balenciaga, mujeres que son polifacéticas y multidimensionales: fuerte y sensual, aunque también austera y misteriosa”, añadió Wang. En los anuncios, Moss y Stone llevan faldas ajustadas y abrigos de diferentes texturas, con un maquillaje sobrio con pómulos muy marcados. Las tops se cogen de la mano, se inclinan la una sobre la otra y sus labios se acercan hasta casi rozarse. El escenario de las fotografías es gris, casi industrial, lo que hace que el aura de misterio que crean las voluptuosas poses de ambas mujeres destaquen todavía más.
La campaña al completo se desvelará a lo largo del mes de julio. ¿Debemos esperar imágenes aún más explícitas o se quedará todo en un jugueteo? No es la primera vez que Kate Moss protagoniza una sesión fotográfica con tintes lésbicos. En marzo de 2013, Moss y Rihanna protagonizaron uno de los editoriales de moda más calientes de V Magazine. Las fotos, tomadas por Mario Testino, mostraban a ambas en posiciones muy sugerentes y jugando la una con el cuerpo de la otra.
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La decisión de Balenciaga de usar un homoerotismo tan explícito en su nueva campaña llega tras una gran controversia en el mundo de la moda este mismo año respecto al tema LGTB. Aún resuenan las palabras de Domenico Dolce y Stefano Gabbana, la pareja más famosa de diseñadores internacionales, que en una entrevista a un medio italiano afirmaron que “nosotros, pareja gay, decimos no a las adopciones gay. Basta de hijos de la química y úteros en alquiler. Los hijos deben tener un padre y una madre”. Estas declaraciones les costaron, además de varios intentos de boicot a su marca, críticas de todo tipo de ambientes. Desde gente de la industria de la moda hasta artistas como Madonna.