La nueva disposición del Gobierno argentino, que pretende acabar con la discriminación hacia los homosexuales a la hora de donar sangre, ya ha sido rechazada por los más alarmistas, que ven la medida como temeraria y creen que será una puerta abierta a infecciones a través de trasfusiones sanguíneas.
La disposición, que será anunciada hoy, defiende que es necesaria porque “hay que poner fin a una larga historia de discriminación institucional hacia la comunidad gay”, explicó el Ministerio de Salud.
Pero otro sector sanitario, más alarmista, asegura que pone en riesgo la salud pública y que pueden producirse transmisión de enfermedades por dejar donar a este colectivo.
Una de las reclamaciones históricas de la comunidad homosexual en el mundo es la donación de sangre bajo los mismos requisitos que el resto de la población, no mejores ni peores, sino iguales. Desde hace 15 años, una prohibición impide a los hombres que mantienen sexo con otros hombres donar sangre, un tema candente en los últimos meses que podíamos ver en estos artículos: Portugal (casi) levanta el veto a la sangre gay; Prohibido donar sangre si eres gay; Francia y el debate de la sangre gay; El debate de la sangre gay.
“Con el objetivo de avanzar hacia un sistema nacional de sangre seguro, solidario e inclusivo, el Ministerio de Salud, a cargo de Daniel Gollan, presentará mañana [refiriéndose al día de hoy] los nuevos requisitos para donar sangre en el marco de las políticas sanitarias impulsadas por esta cartera y en particular desde el Plan Nacional de Sangre, con el objetivo de poner fin a una larga historia de discriminación institucional hacia la comunidad de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales”, informó ayer en un comunicado de prensa el Ministerio de Salud, durante la convocatoria a las organizaciones LGTB.
Hasta ahora, un cuestionario similar al de muchos otros países, inhabilitaba por más de 12 meses a donar sangre a hombres que hubieran tenido sexo con hombres o mujeres que habían mantenido relaciones sexuales con mujeres.
“Tras nuestro reclamo de 15 años, el Ministerio de Salud por fin cambiará el formulario para los donantes de sangre. Ahora se harán las preguntas correctas, y se dejará de rechazar y discriminar a las personas por su orientación sexual”, dijo al diario Clarín César Cigliutti, presidente de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA). “Se elaboró un nuevo cuestionario con mejores preguntas sobre las prácticas sexuales. Esto garantizará un mejor resultado y se promoverán las donaciones voluntarias y seguras, sin discriminaciones al colectivo gay”.
Sin embargo, un sector de la población no ve con buenos ojos la nueva medida. Muchos han manifestado su descontento, como la Asociación Argentina de Hemoterapia e Inmunohematología, con el apoyo de la Academia Nacional de Medicina, quienes aseguran que se pone en riesgo la salud pública. Según argumentan, si los HSH donan sangre aumentará el riesgo de los pacientes que la reciben a adquirir más enfermedades de transmisión sexual, como el virus del VIH. Un debate de la sangre que ya vivimos en Europa hace unos meses.