El término ‘lumbersexual’ hace referencia a ese tipo de hombres con una imagen algo desaliñada, parecida a la de un leñador (lumberjack en inglés). Se caracterizan por dejarse una barba milimétricamente descuidada y por vestir habitualmente con vaqueros y camisas de cuadros. Además, a los lumbersexuales les gusta la vida sana, el ejercicio físico y no se les caen los anillos por hacer las tareas domésticas. Vamos, unas joyitas que cualquiera querría tener en casa.
A esta tribu de supermachos refinados pertenece el modelo Brock O’Hurn. La fama del californiano de 23 años, convertido en fenómeno de redes sociales con un simple vídeo en el que se recogía el pelo, no ha parado de crecer. Las marcas se lo rifan y sus seguidores se han disparado.
Normal que tenga a todos revolucionados. Sus más de dos metros de altura, su cuerpo hercúleo y su melena tarzanesca no dejan indiferente. Además, el maromo sabe cómo combinar su lado más aventurero y surfero
con otro más sofisticado y glamuroso.
El resto lo dicen sus fotos.