8 razones por las que salir con un chico fofisano

Normalmente, cuando pensamos en un chulazo nos viene a la mente el típico chico con cara fina y delgada, una tabletita de chocolate y unos brazos y piernas definidos. Vamos, lo que conocemos coloquialmente como un chico fitness. Pero en la viña del señor hay mucha variedad, y también nos podemos encontrar otro tipo de chulazos, que no son para nada fitness pero que desprenden un ‘no sé qué’ y un ‘qué se yo’ que nos ponen a palpitar en cuestión de segundos. Y es que un chico fofisano es una opción de lo más recomendable. ¿Por qué? Sigue leyendo y es posible que te sorprendas.

Son muy cómodos

No pienses mal. No son ninguna almohada sobre la que tumbar la cabeza. Nos referimos a la hora del arrumaco. Un chico voluminoso te puede regalar los abrazos más cálidos y afectuosos que puedas experimentar a lo largo de tu existencia. Sobre todo si se producen en las frías y heladas noches de invierno. Sentirás cariño y protección por partida doble.

Seguridad en sí mismo

Vivimos en una sociedad un poco cruel a veces, y si te excedes del peso establecido por los estándares sociales te lo echan en cara, y no con muy buenas maneras. Algunos de estos chicos lo saben muy bien. Es por ello que algunos han desarrollado un sistema de defensa en donde llevan por bandera la seguridad en sí mismos como método de contraataque, contagiando a la vez a su pareja de dicho mecanismo. Un beneficio enriquecedor para la vida conyugal. 

Son simpáticos

 Parece ser que cuanto más volumen de cuerpo, más volumen de buen humor y sociabilidad desprenden. Y eso es un cúmulo de risas garantizadas que seguro alargarán y mejorarán la vida en pareja. 

Lucen barba

 Son los ‘number one’ a la hora de lucir el vello facial. Es como admirar a un oso pardo en plena época de celo, ¡todo morbo!

Expertos cocineros

Muchos de ellos son unas auténticas máquinas en el ámbito culinario. ¿Y lo bonito que es llegar a casa y ver que tu chico que te ha preparado una suculenta y generosa gama de platos absolutamente deliciosos? La conquista que empieza por el estómago… termina llegando al corazón.

Son determinantes y detallistas

Cuando se plantan en seco y se proponen algo, no paran hasta conseguirlo. Ya sea perder algún que otro kilito de más, o a la hora de preparar la declaración de amor más bonita y original que se haya visto jamás. Si no que se lo pregunten al actor Daniel Franzese.

Nos hacen sentirnos seguros

Muchos han sentido en sus propias carnes las burlas y la discriminación por tener unos kilitos de más. Son perfectamente conscientes del dolor que supone ese tipo de situaciones injustas, y por ello suelen ser muy empáticos con el aspecto físico de su pareja en todos los sentidos. 

Son unos hachas en la cama

Dicen que la carne puede ser el aliciente que te lleve al pecado, así que, cuanta más carne… mucho más pecado.

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