El Padre Ángel acudió ayer, miércoles 18, por la tarde a FITUR a recoger el Premio Excelencia por su proyecto de restaurante solidario Robin Hood, un galardón que se entregó en el escenario de la sección GAY LGBT de FITUR. Al ver el stand que Shangay tiene en la Feria Internacional de Turismo, el sacerdote quiso pasar a saludarnos. Allí le dimos la enhorabuena por el éxito de su nuevo proyecto y nos contó cómo funciona: “Pues es muy sencillo, la solidaridad de los que van a desayunar o a comer, porque tienen medios económicos para poder hacerlo, sirve para que los que no tienen recursos, los sin techo, puedan ir a cenar cada noche. Además, este restaurante sirve para decir a los demás que vivimos en un mundo en el que, entre todos, podemos hacerlo mejor, donde unos compartimos con otros. Y lo estamos haciendo mejor. Robin Hood no es robar al rico para dar al pobre, sino compartir”.
El restaurante, gestionado por la ONG Mensajeros de La Paz, se encuentra en pleno centro de Madrid, por la zona de la Glorieta de Bilbao (en la calle Eguílaz número 7) y se financia con los desayunos y almuerzos, que permiten recaudar el dinero necesario para las cenas.
El Padre Ángel en el stand de Shangay en FITUR GAY/LGBT.
Como hemos dicho, el galardón se entregó en el escenario de la sección LGTB de Fitur, o sea que de nuevo vimos al Padre Ángel apoyando al colectivo: “Creo que más que apoyando yo, son ellos, sois vosotros, los que me apoyáis a mí. Estamos compartiendo y queriéndonos unos a otros, que es, al final, el mejos mandamiento: quererse”. El sacerdote asegura que no tiene miedo a que le den un ‘toque’ por estos explícitos gestos. Recordemos la contundente entrevista que nos dio a finales del pasado año. “No, no. En absoluto tengo miedo. Nunca me van a dar un toque por querer a la gente. Pueden dármelo por no querer a la gente o por poner violencia, pero por querer no. Yo siempre querré a la gente, esté donde esté, sean quiénes sean o sean como sean”. Amén.
Más noticias LGTB, AQUÍ