Ocurrió a finales de la semana pasada en Madrid. Martín tiene siete años y estaba en el cole jugando al fútbol cuando le llamaron “maricón”. El niño, sin saber qué contestar, llegó a su casa y preguntó a su madre. Ante la explicación que esta le dio, “un chico al que le gustan los chicos”, el niño le contestó: “Ah, pero eso es ser gay, no maricón”, algo que hizo que la madre estuviera tan orgullosa de la educación que le está dando a su hijo que ha querido compartirlo con todos los lectores de shangay.com: “Sigo pensando que hacen falta muchas generaciones de educación para acabar con la violencia de género, la homofobia y todas esas cosas. Así que, por mi parte, que no quede”, nos dice.
Pero el tema no queda ahí, según nos cuenta: “El otro día, un amigo mío le dijo ‘Anda, Martín, si el piloto de tu helicóptero de rescate es una chica’, y contestó mi pequeño ‘pues claro’, así, sin darle ninguna importancia, y siguió jugando con sus Playmobil… Y aunque luego me van a malear al niño, digo yo que esa es la auténtica tolerancia: que no le dé ninguna importancia a si es chico o chica, que no se tome maricón como un insulto, que lo mismo pida para Reyes las zapas de Pogba que una cocinita y que juegue a pases de modelos con mi sobrina”.
Pues desde aquí solo podemos felicitar a su madre y desear que haya muchos niños como Martín en los coles de España, para evitar que el ‘maricón’ de que aún suena en los recreos, pronto pase a ser historia. ¡Gracias por compartirlo con nosotros!
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