El Padre Ángel con la autora del libro, Lucía López Alonso, colaboradora suya en Mensajeros de La Paz.
Que el Padre Ángel es una rara avis dentro de los sacerdotes de la Iglesia católica, sin pelos en la lengua, es algo más que sabido. En más de una ocasión le hemos entrevistado y ha mostrado su abierto apoyo al colectivo gay, yendo muchas veces contra la postura oficial de los obispos. Hoy, miércoles 24 de mayo, acaba de presentar en la iglesia de San Antón, que es sede de Mensajeros de La Paz y que está abierta 24 horas al día, el libro Padre Ángel, la humildad y la rebeldía, escrito por Lucía López Alonso, colaboradora directa suya en Mensajeros, y cuyos beneficios van destinados íntegramente a esta ONG.
Durante la rueda de prensa, muchas preguntas fueron directas a si había sentido rechazo por parte de la Conferencia Episcopal o algunos curas al uso que da al templo, que no cierra nunca, y en el que los sin techo pueden dormir, desayunar, comer o cenar. “Alguno ha habido, pero poco. Sin rebeldía, muchas de estas cosas no se podrían hacer”. Una vez terminada la ronda de preguntas, al ir a despedirnos, le preguntamos si tener esta iglesia abierta, en pleno barrio gay, y la buena relación que él mantiene con el colectivo LGTB era un acto de ‘rebeldía’ o de ‘provocación’… Tras pensar medio segundo, su respuesta fue directa: “Ni una cosa ni la otra, es simple y llanamente, de sentido común”.