¡Cuidado!: Nuevas víctimas del ladrón de Grindr

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Sí, el ladrón de Grindr sigue suelto y haciendo de las suyas. Hace escasos dos días nos llegaba la noticia de un usuario de la famosísima aplicación gay al que le sustrajeron 1200 euros tras robarle la tarjeta bancaria y el DNI. El modus operandi es idéntico en todos los casos que se denunciaron. Una vez el ladrón está en casa de la víctima, empieza todo un círculo de manipulación en el que se gana poco a poco la confianza de la misma: se trata de conseguir información referente a los bancos con los que trabaja.

Ha vuelto a saltar la alarma cuando gracias a la difusión de lo sucedido nos siguen llegando numerosos testimonios sobre casos idénticos. Concretamente, nos han sorprendido las declaraciones de un usuario de Grindr que asegura tener información e incluso fotografías del presunto asaltante (información que coincide con la que aportan otros afectados), y que no podemos revelar por motivos de protección de datos. Este denunciante nos asegura que el ladrón no solo opera en Madrid, aunque tiene establecido en la capital su núcleo principal de robos, así como que pertenece a una familia de nivel socioeconómico medio-alto. “A mí me robó el coche y las cuentas bancarias, y todo sin darme cuenta. Cuando denuncié, como sabía su nombre, me sacaron su ficha y me dijeron que tenía como 30 antecedentes de estafas y falsificaciones”, según relata esta víctima.

No queremos crear alarma, sino concienciar de un buen uso de este tipo de aplicaciones. Algunos consejos que podríamos tener en cuenta para usar Grindr de un modo óptimo y sin malos rollos, podrían ser los siguientes:

• No meter a alguien en casa si pensamos que no tenemos la suficiente confianza con esa persona o, en caso de que lo hagamos, intentar no dejarle solo en ningún momento.
• Asegurarnos de tener al menos su número telefónico para poder localizar a la otra persona en caso de que pase algo. Si el único contacto que tenemos con el ladrón es por vía Grindr, será tan fácil para él como bloquearnos de la aplicación para que le perdamos la pista.
• No desvelar información confidencial (datos personales, bancarios, etc.) a personas con las que quedemos de forma esporádica.
• En caso de sospechas de que se ha podido producir algún tipo de sustracción, ir a denunciar la situación lo antes posible.
• Si notamos algún tipo de comportamiento extraño o fuera de lo común en la persona con la que estamos en el momento, podemos sentirnos libres de interrumpir la cita si así lo deseamos. La seguridad siempre debe prevalecer frente a un polvo…, por muy bueno que este pueda ser.