Aprovechamos nuestro viaje con Miguel Ángel Muñoz en Asturias para hacer un repaso de sus etapas en Un paso adelante (UPA) y en el grupo de música que nació con la serie, UPA Dance. Dieciséis años después, el actor las sigue recordando con cariño y con una pizca de nostalgia, aunque reconoce que no fue un trabajo nada fácil. Además, le invitamos a descubrir lo relevante que fue la serie para crear notoriedad LGTB dentro de la ficción española. Una normalidad con beso gay a Asier Etxeandia incluido.
SHANGAY ⇒ ¿Eres consciente de lo importante fue UPA para la visibilidad LGTB en la ficción española?
MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ ⇒ Mi primera escena en Un paso adelante, mi primer día de rodaje, fue una secuencia que hice con Asier Etxeandia. Él interpretaba a un personaje gay que se llamaba Beni.
Miguel Ángel Muñoz y Asier Etxeandia (2002)
Yo iba a un bar donde estaba actuando y me acababa dando un beso en la boca… Pero no sabía que había sido como una serie referente y que había estado tan presente en el colectivo LGTB. Me alegro mucho.
SHANGAY ⇒¿Participarías en un regreso de UPA?
MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ ⇒ No. Creo que segundas partes, salvo El padrino, nunca fueron buenas. Muchas veces se ha hablado de poder volver a hacer la serie, con nosotros como profesores…, pero sería desvirtuar lo que hicimos en su día. Creo que ahora sería muchísimo mejor, pero lo tendrían que hacer otros. Y si yo participase en un proyecto similar, pues haría de otro personaje. Pero lo que hicimos hace ya dieciocho años casi que comenzamos a grabarla, se tiene que quedar ahí. Además, así se queda con la esencia y con el recuerdo de que fue algo importante, muy transgresor. Si lo hiciéramos ahora, seguramente saldría mal.
SHANGAY ⇒¿Qué sientes cuando suena una canción de UPA Dance?
MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ ⇒ A mí me divierte mucho y me hace muchísima ilusión. Cada vez que voy a un sitio y de repente me ponen una canción, para hacer la broma o porque les gusta, recuerdo todos los momentos que viví por aquel entonces. Me hace mucha gracia.
Discos UPA Dance (2002) y Contigo (2005)
Yo me veo en los videoclips que grabamos hace dieciséis años y me puedo mirar sonriendo, sintiéndome orgulloso de aquello que hacía y que a mí me costaba muchísimo esfuerzo. Nadie sabe realmente lo que me pasaba por dentro, a pesar de que encima del escenario me comía el mundo. Me hace mucha ilusión que se siga recordando y que la música siga sonando.
SHANGAY ⇒¿Fue tan complicado gestionar el éxito que vivisteis con UPA?
MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ ⇒ Era muy difícil lo que estaba haciendo. Acababa de terminar COU, había empezado a trabajar a los diez años, y desde los diez hasta los dieciocho años estudiaba y trabaja. Me quería formar en una escuela como la de Un paso adelante, pero no me dio tiempo. Me iba a ir a aprender inglés y surgió el proyecto; entonces me tiré bailando ocho horas, durante tres meses para conseguir el papel, y me lo dieron.
Asier Etxeandia, Mónica Cruz, Miguel Ángel Muñoz, Beatriz Luengo, Pablo Puyol y Silvia Marty
Pero a diferencia del resto de mis compañeros, ellos venían de bailar, eran bailarines profesionales o venían de hacer musicales. Para ellos todo lo que hacíamos en la serie era algo normal, a mí me costaba muchísimo esfuerzo. Lo llegaba a disfrutar, pero lo tenía que trabajar un montón y hasta que no estaba encima del escenario no me lo terminaba a creer. Y todas las horas antes y después era «Dios mío, qué difícil, los demás lo hacen mucho mejor…». Me costaba mucho, sin embargo, eso el público no lo notaba.
SHANGAY ⇒ ¿Tu etapa en UPA influyó en tu buen estado de forma actual?
MIGUEL ÁNGEL MUÑOZ ⇒ Yo creo que el cuerpo tiene memoria genética, y me lo modificó mucho Un paso adelante. Solo estar preparándome las pruebas y machacando la elasticidad… Yo jugaba al fútbol y me abría de piernas muy poquito, era un palo de madera, y llegué a conseguir una elasticidad como el resto de mis compañeros e incluso en algunos casos más.
Pablo Puyol y Miguel Ángel Muñoz (2002-2005)
Obviamente, he perdido un poco, pero sigo manteniendo. Fueron tres años y medio de estar bailando todos los días. Además, yo le echaba unas cuantas horas más que el resto porque lo necesitaba, porque no sabía tanto como ellos y me tenía que esforzar más. Yo sigo siendo inquieto y he seguido practicando deporte, y desde hace casi cuatro años hago también yoga…
VÍDEO: Su beso a Asier Etxeandia