Blas Cantó está de dulce. El ex Auryn, después de ponernos los dientes largos con sus primeros singles, Él no soy yo, In Your Bed o Drunk and Irresponsible, se encuentra en un momento de madurez envidiable tras lanzar su primer álbum, Complicado. “Hay que soñar alto; siempre he soñado a gran escala, desde que estaba en el grupo. Si no, para eso te quedas en tu casa”, nos contó en exclusiva la última vez que pasó por la redacción de Shangay, justo después de proclamarse vencedor del talent de Antena 3 Tu cara me suena.
Aquel día decidió compartir su premio con su compañera Yolanda Ramos y destinó parte del dinero a Chysallis, la Asociación de familias de menores transexuales. «Me informé de a qué asociación donaría ella el dinero, y me hizo mucha ilusión saber que iba a ser para una asociación de apoyo a la comunidad transexual, porque así se hablaría de ese tema», recuerda.
No es la primera muestra de cariño de Cantó a la comunidad LGTB, para la que siempre ha tenido palabras de aliento. Y no será la última. Sin ir más lejos, en la la cena de nominados a Los 40 Music Awards, organizada por la icónica cadena de radio, donde los artistas patrios más importantes nos dieron la clave para convertirse en un icono gay de la música, Cantó volvió a mostrar su compromiso. “Hay que tener mucho corazón, defender al colectivo LGTB con garras y darle mucho cariño”, explicaba, en tiempos donde cada palabra todavía cuenta más de lo que debiera…
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