El Ayuntamiento de Madrid ha llegado a un acuerdo pionero con los sindicatos. Los empleados que estén en proceso de reasignación sexual podrán cambiar su nombre aunque no figure en el DNI.
El plazo que se ha establecido es de tres meses máximo. De esta forma, se pretende respetar la identidad de género de todas y cada una de las personas que trabajan cada día en consistorio madrileño.
La Ley de Identidad de Género de 2007 establece que las personas en transición sexual no pueden hacer cambios en su DNI hasta pasados dos años de hormonación.
«La medida quiere garantizar los derechos a las empleadas y empleados municipales que manifiesten una identidad de género distinta a la asignada al nace», afirman desde el Ayuntamiento de la capital.
Además, Celia Mayer, delegada de Políticas de Género y Diversidad, ha puesto como ejemplo a la Universidad de Alicante, que cuenta con políticas similares. «El fin es proteger el ejercicio de los derechos de identidad y expresión de género», como se recoge en el protocolo.
Sin duda, una buena noticia para todos aquellos empleados municipales que no se sienten identificados con lo que pone en su DNI.
Poco a poco se va a avanzando cada vez más en lo que respecta a la diversidad sexual y la tolerancia hacia la identidad de las personas. No solo en el terreno institucional. También en el deportivo como ya os hemos contado en el artículo sobre Alba Palacios, la primera mujer trans en jugar de forma oficial al fútbol.