Siempre emociona que, frente a los ataques y desprecios homófobos irracionales, se responda con gestos inspiradores que defienden la propia identidad, el respeto y la igualdad. Es lo que han hecho el artista Matt Simons y la compositora y cantautora Amy Kuney –también conocida como Ames–; él, como intérprete y ella, como coautora de Amy’s Song.
Con esta canción, y su recién estrenado vídeo, han querido compartir lo que sienten: que la sexualidad de cada uno es asunto suyo y de nadie más, y que todos debemos buscar dentro de nosotros la fuerza para defender nuestra propia identidad contra viento, marea y cualquier insulto o menosprecio.
Amy Kuney se inspiró para este tema, al fin y al cabo titulado La canción de Amy, en su amarga experiencia al salir del armario como lesbiana, en un entorno cristiano de lo más conservador en el que se vio absolutamente incomprendida.
Kuney es una de las 41 personas LGTBI que se ofrecieron a participar en el vídeo dirigido por Kris Pouw, rodado en un único plano secuencia. Todo los beneficios que genere se destinarán a la United Nations Foundation, concretamente a sus campañas destinadas a promover la igualdad.
En el clip, a través de los carteles que llevan algunos de los participantes vamos descubriendo la letra de la canción, cuyo mensaje central es: “Does your God really give a damn / Does it make her less of a woman / Does it make him less of a man / Being who I am» [¿Realmente le importa a tu Dios? / ¿Soy menos mujer? /¿Soy menos hombre? / ¿Por ser quien soy?].
Algunas parejas aparecen simplemente con las manos unidas, recordando la acción viral #allemannenhandinhand, que surgió a raíz del ataque homófobo que sufrió una pareja gay en la ciudad holandesa de Arnhem en 2017. «No puedes luchar contra tu corazón», canta Matt Simons en un momento dado. No es Amy Kuney la única que lo siente como él. Y a partir de ahora, gracias al hashtag #BeingWhoIAm, descubriremos a mucha gente más que siente lo mismo, y no se oculta a la hora de expresarlo.
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