La Super Bowl es uno de los acontecimientos deportivos más esperados del año, no solo en Estados Unidos, sino también en el resto del mundo. El intermedio de este partido de fútbol es un verdadero espectáculo de millones de euros en el que, en alrededor de quince minutos, podemos ver a cantantes o grupos de la talla de Beyonce, Coldplay o Lady Gaga. Este año, los encargados de levantar este show han sido Maroon 5. El grupo encabezado por Adam Levine cantó algunos de sus grandes éxitos como Girl Like You, Sugar, o This Love.
Sin embargo, a pesar de que el cantante se quitase la camiseta, las críticas no han tardado en llegar y muchos han calificado su actuación de plana, aburrida y básica. Un intermedio con polémica previa, ya que algunos artistas, como Rihanna o Pink, rechazaron actuar en él como protesta a la expulsión, por parte de la NFL, del jugador Colin Kaepernick. El motivo de esta medida fue que hincó su rodilla cuando sonaba el himno nacional, como forma de protesta contra la brutalidad policial hacia los negros.
En el show también participaron los raperos Travis Scott y Big Boi, que también fueron duramente criticados, aunque ninguno hizo referencia a la polémica racial. Los artistas simplemente declararon que su aparición en la Super Bowl era una gran oportunidad para dar a conocer su música. Por otro lado, las redes sociales también juzgaron la desigualdad de género del acto, ya que en 2004 Janet Jackson fue censurada y duramente criticada cuando en un “descuido” se le vio un pecho, mientras que a Adam Levine no se le puso ningún impedimento para enseñar su torso.