“La ropa no tiene género, la ropa es de quien la quiera comprar”. Con estas palabras, Lorenzo Caprile comenzaba la prueba de eliminación de Maestros de la costura, que se emitía anoche en Televisión Española. Una prueba que consistía en transformar un vestido en una prenda que no estuviese asociada tradicionalmente a lo femenino. Los tres jurados del programa quisieron matizar antes de esta prueba que la ropa es de quien se la quiera poner, independientemente de si esa prenda se encuentra en la sección de hombre o de mujer.
Ante esto, Lara Sajen, que tanta visibilidad está dando al colectivo trans dentro del programa, declaraba: “La ropa no tiene género: Ojalá me lo hubiesen dicho a mi hace 35 años y otro gallo cantaría”. Con estas palabras, la concursante destacaba lo valioso que es lanzar a la sociedad este tipo de mensajes de libertad y de igualdad. Sajen además optaba por transformar la prenda femenina en “una prenda que sirviera para un chico y una chica”, por lo que se decantó por crear una bomber.
Una prueba que tenía una gran influencia de Palomo Spain, pues el diseñador español crea prendas que rompen los convencionalismos de género. “Palomo Spain presenta colecciones masculinas que enamoran por igual a hombres y mujeres”, decía Caprile. Ante esto, el joven diseñador, de manera modesta, afirmaba que no ha inventado nada nuevo, y señalaba que “la costura sirve para abrir las miras, en lugar de cerrarlas… Esta puede ser un lugar de reflexión”.