Tan solo hacen falta unas notas para reconocer la melodía, surgida de una caja de música, de una de las canciones principales de Anastasia, Una vez en diciembre. La película de dibujos animados estrenada en 1997 fue un gran éxito que marcó a toda una generación. “No es una historia que pretenda enseñar una moraleja en concreto, o quién es el bueno y quién el malo. Creo que cada personaje tiene un viaje propio, con unos valores, creencias y un trasfondo que hace que, a ojos del espectador, su evolución sea muy real”. Son palabras de la actriz barcelonesa Jana Gómez, que se mete cada día en la piel de su protagonista en el musical que aterrizó en Madrid hace unos meses.
La historia de Anastasia mezcla realidad y leyenda, nos presenta a Anya, una mujer “con carácter, independiente, que toma sus propias decisiones… muy a la orden del día”, –tal y como explica Gómez– que empieza a sospechar que podría ser la gran duquesa Anastasia, desaparecida tras la Revolución Rusa. En la película de dibujos animados, el culpable del final de la dinastía de los Romanov era el malvado brujo Rasputín, sin embargo, en esta adaptación a las tablas, la historia opta por un enfoque más realista. “Es un acierto haber cambiado el personaje de Rasputín por el de Gleb” –un comisario bolchevique que busca averiguar si Anya es la auténtica hija del zar–, cuenta la actriz. “Se tomó esta decisión para dar un tono más adulto a la trama y crear un conflicto más interesante que pudiera gustar a todos los públicos”.
Vestido LORENZO CAPRILE y joyas DANIEL ESPINOSA
De hecho, la cinta de 1997 no es la única de la que bebe el musical, como explica Íñigo Etayo: “También se basa en la película de 1956 protagonizada por Ingrid Bergman”, por la que ganó el Oscar a mejor actriz. “Así se consigue un punto de vista nuevo que engancha de nuevo a la gente, el cuento ha madurado”. El actor pamplonica interpreta en este montaje a Dimitry, un joven oportunista que diseña un plan para hacer pasar a Anya por la gran duquesa, y cobrar así una importante recompensa.
Pantalón y camisa KARL LAGERFELD, blazer LORDS&FOOLS para elitestores.com, zapatos JIMMY CHOO y pajarita PEDRODELHIERRO
Tanto Jana como Íñigo llevan años ligados al género musical, sin embargo este ha sido un gran salto profesional. “Anastasia está siendo un escaparate realmente grande”, cuenta la catalana. “Recibo mensajes a diario de gente que agradece el trabajo que hacemos en el musical, y eso es muy satisfactorio”. Etayo también se muestra más que agradecido por esta oportunidad. “Nunca había experimentado algo así. Cuando empecé haciendo microteatro siempre aspiraba a hacer algo como esto, y ahora que lo tengo me parece surrealista. Es algo muy especial, y creo que difícil de repetir”.
Aunque un proyecto de estas características también conlleva mucho esfuerzo. “En el teatro musical no desconectas nunca del personaje, es muy duro y cansa mucho, pero luego piensas en todo lo bueno y no te puedes quejar”, dice el actor navarro. “Yo tengo que escucharme a mí misma para saber cómo estoy anímicamente y físicamente”, explica Gómez. “Hacemos ocho funciones cada semana, y cada una de ellas es distinta. Somos personas normales y no siempre estamos igual, por eso tenemos que aceptar que hay días en los que la función saldrá diferente y enfrentarnos a ello”.
Cuando mencionas a Anastasia y Dimitry, lo más común es que vengan a la cabeza los rostros de los personajes animados. Lo mismo que le ocurrió a Íñigo Etayo cuando le dieron la noticia de que sería el encargado de dar vida al personaje. “Soy muy fan de la película, sé que es un personaje que la gente quiere mucho, y no me parezco en nada… Los meses previos al estreno lo pasé mal, tenía mucha presión”. Por su parte, Jana lo vivió mucho más relajada. “Anya es un personaje con límites muy amplios, podría ser interpretado de muchas formas y por perfiles distintos. Obviamente, todo el mundo tiene en su imaginario a su Anastasia, y sí siento la necesidad de estar a la altura”.
La de Madrid es la segunda adaptación del musical de Anastasia en todo el mundo. Se estrenó en Broadway en 2017, y un año más tarde desembarcó en la Gran Vía, sin pasar siquiera por el famoso West End londinense. “Es una responsabilidad, pero la sentiría igual aunque fuese la quinta Anya del mundo”, bromea Jana Gómez. Hechos como este son ejemplos del gran momento que está viviendo el género en nuestro país. “Hay un boom increíble, no solo de cantidad, también de calidad”, dice Etayo. “Recuerdo que la letrista de las canciones originales, Lynn Ahrens, nos dijo después de ver la función: siempre hemos dicho ‘calidad Broadway’ y ahora vamos a decir ‘calidad Madrid”. Palabras que vienen de una profesional con varios premios Tony, Drama Desk y Outer Critics Circle, y dos nominaciones a los Oscar y Globos de Oro, junto a Stephen Flaherty, por la banda sonora original de Anastasia, que se ha renovado en esta adaptación a las tablas de la historia.
Sin embargo, aquí no encontraremos las famosas letras que muchos ya se saben de memoria desde que vieron la película cuando eran unos niños. “Se han cambiado para ser más fieles a las canciones originales”, cuenta Íñigo Etayo. “En las películas de dibujos se suelen hacer traducciones más abiertas de las composiciones en inglés, aunque se respete el mensaje. Pero en un musical las canciones tienen una finalidad narrativa, tienen que contar cosas, y estas nuevas letras son una traducción más literal de las de la película original, que son las mismas que suenan en el musical de Broadway”.
Íñigo lleva pantalón MARCIANO, camisa KARL LAGERFELD, zapatos ANTONY MORATO y blazer CHRISTIAN PELLIZZARI para elitestores.com
Jana lleva vestido LORENZO CAPRILE y joyas DANIEL ESPINOSA
En su carrera hasta llegar aquí, ambos intérpretes han pasado por infinitas pruebas, pequeñas obras y también algún que otro musical. Son testigos de que el camino es duro, pero la recompensa hace que se olvide lo demás. “Pasas varias fases de audiciones, que suponen nervios y semanas de preparación, y cuando finalmente lo consigues, sabes que en algún momento se va a acabar, y tendrás que volver a pasar por ese proceso una y otra vez. Es una locura y tienes que estar mentalmente preparado para ello. Pero cuando consigues algo, por pequeño que sea, eres feliz. Y en mi caso, ahora mismo, lo soy mucho”, nos cuenta Jana Gómez.
Por su parte, Etayo dice acordarse de todos aquellos seres queridos que le apoyaron durante los primeros años cada vez que se sube al escenario. “Pienso en la gente que venía a verme actuar en pueblos de Navarra. Recuerdo a mi madre en el estreno de Anastasia, se quedó sin palabras, y eso es una sensación increíble para mí”, cuenta emocionado. “Estoy muy orgulloso de haber empezado en teatro universitario, haciendo cosas muy pequeñas, porque gracias a eso he adquirido muchas cosas que no todo el mundo tiene”.
Y esa ilusión se plasma en su sonrisa al contarlo, y en la energía que desprenden sobre el escenario al interpretar este cuento en donde el espectador, sin moverse del madrileño Teatro Coliseum, hace un viaje desde las grises calles de San Petersburgo hasta el brillo y la elegancia de la ciudad de la luz por excelencia, París. Un montaje que, tras su primer año en Nueva York, acumuló 25 nominaciones a importantes galardones. Un éxito que Madrid ha acogido con los brazos abiertos.
Fotos: danniel rojas
estilismo: Abraham rodríguez
maquillaje y pelo: mario rubio (Para i.c.o.n.)
ayte. fotografía: adrián campos
agradecimientos: embajada de italia
el musical ANASTASIA SE REPRESENTA EN EL TEATRO COLISEUM DE MADRID