Son dos de los artífices de La jaula de las locas, el musical de Broadway que arrasa en Barcelona y que en octubre llegará al teatro Rialto de Madrid. Estuvimos en una comida con Àngel Llàcer y Manu Guix, que nos desvelaron por qué esta obra, todo un homenaje a la pluma y a la libertad de que cada uno sea como quiera ser, ha calado tan bien en el público: «Nos hace muy felices ver cómo hacemos felices a los demás», nos dijo Àngel antes de ponerse a cantar uno de los temas.
«Es una historia muy sencilla: una historia de amor, sin más. Es como Pretty Woman, que la gente no se cansa de verla… Pues pasa igual. El tema es que cada uno sea sincero consigo mismo, porque la hipocresía sigue existiendo. Cuando canto el famoso tema Yo soy como soy, el que lo canta soy yo, Àngel, no es Alvin, mi personaje. Sin exigir nada a nadie, que cada uno sea como quiera ser», asegura.
Manu Guix, por su parte, es el director musical de la función. «La obra es tan buena que no hubo que tocar ni una sola nota, no hubo que adaptar nada. Sigue siendo completamente actual, pese a ser una partitura y un texto que se estrenó en Broadway en 1983».
«La pluma es la excusa para que cada uno sea lo que quiera ser, lo que siempre haya querido ser. Y sobre todo, para el sentido del humor, que es lo mejor que tiene La jaula de las locas«, nos dice Ángel. Hay que recordar que la música es del gran Jerry Herman, autor de Hello, Dolly!, con un libreto de Harvey Fierstein. El tema central, I am what I am, es un himno gay que ha sido versionado por todos los grandes.
La función ha roto la taquilla desde que se estrenó en el Teatro Tívoli de Barcelona, y aterrizará en la Gran Vía madrileña, en el Teatro Rialto, en octubre. ¡Hay que sacar la pluma, sin duda!
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