Seguro que son muchos los lectores que conocerán ya de pies a cabeza (literalmente hablando) al actor porno gay Martín Mazza. Durante el confinamiento, una buena forma de desconectar ha sido recurriendo a su trabajo y el de sus compañeros.
Al igual que muchos sectores, el rodaje del cine para adultos tuvo que parar de inmediato por la COVID-19, pero ya están rodando a marchas forzadas todo lo que en estos meses no han podido. En medio de tanto caos sanitario y social, realizamos una entrevista al actor para conocer un poco más de cerca cómo ha afectado la pandemia al porno gay.
Mazza, que ha pasado la enfermedad pero ya está recuperado y con fuerzas para trabajar, nos habla sobre este y muchos más temas ligados a su vida laboral y amorosa.
Pedro Esquerdo, su nombre de pila, vive en el barrio madrileño de Malasaña y lleva 22 años dedicándose a esta profesión. Afirma que está siendo un verano sin precedentes en las grabaciones y que ha habido un gran aumento de chicos que quieren trabajar en el mundo del porno por el incremento de desempleo en otras áreas.
Habla claro sobre los prejuicios sobre su trabajo en un momento tan delicado como el que estamos atravesando: “Quiero dar visibilidad a la industria del porno, y más en estos tiempos del coronavirus; hay gente muy intransigente con los trabajos de los demás”.
Lamenta los riesgos a los que se están exponiendo él y los demás chicos al ser un trabajo de contacto físico, y los sinsabores por los que han tenido que pasar. Además, confiesa las ganas que tiene de recuperar su relación con Luis Rollán, y lo buen compañero que fue del actor porno Macanao Torres, que falleció a finales del 2019.
SHANGAY ⇒ Has pasado el coronavirus… ¿Cómo estás?
MARTÍN MAZZA ⇒ Unos cuantos amigos y yo hemos pasado la enfermedad. Tuve los síntomas y la superé. Estuve tres días con fiebre en cama y dos semanas muy cansado y con tos. Tengo una cierta inmunidad, tengo los anticuerpos. He retomado el trabajo tras el confinamiento, y al igual que todos los chicos que trabajan conmigo nos arriesgamos bajo nuestra responsabilidad. Estoy rodando todos los días con muchísimos chicos.
SHANGAY ⇒ Durante el confinamiento se suspendieron los rodajes. ¿Dudaste si volver?
MARTÍN MAZZA ⇒ No quiero parecer un terrorista social, ojalá pudiera permitirme no trabajar o hacer otra cosa, pero no he recibido ninguna ayuda, y mes a mes tengo mis gastos. He pensado más de una vez si dejar o no en el porno, pero no me queda más remedio que seguir. Me encantaría poder irme a vivir al campo y olvidarme de todo esto, pero no puedo hacerlo; ojalá pueda cuando me jubile, por eso estoy trabajando ahora.
SHANGAY ⇒ Tu trabajo implica mucho contacto físico… ¿Se pueden tomar precauciones para reducir el riesgo de contagio?
MARTÍN MAZZA ⇒ Ahora no hay tantos besos, las escenas se ruedan más rápido, detrás de las cámaras todos llevan mascarilla y se guarda la distancia de seguridad. Los actores tenemos que juntarnos, aunque se usan desinfectantes continuamente.
SHANGAY ⇒ ¿Crees que se está estigmatizando la profesión?
MARTÍN MAZZA ⇒ Para muchas personas será una locura que esté rodando películas porno, con lo que eso supone, pero no puedo estar tirando de mis ahorros mucho más tiempo, porque algún día se acabarán. Para salir adelante es indispensable que sigamos trabajando. Muchos chicos que viven al día de esto tienen que arriesgarse o cambiar de profesión, y la cosa no está fácil.
SHANGAY ⇒ ¿Tienes mucho trabajo ahora?
MARTÍN MAZZA ⇒ Se paró radicalmente la profesión, y la demanda de vídeos porno en Internet aumentó muchísimo. Ahora hay que recuperar los meses de parón, hay mucho curro este verano. Jamás en mi vida había rodado tanto. En este mes y medio desde que retomé la actividad, tengo que hacer unas cincuenta escenas aproximadamente, y en dos semanas llevo dieciséis grabadas.
SHANGAY ⇒ ¿Ha habido un aumento de chicos que quieran rodar porno gay tras el confinamiento?
MARTÍN MAZZA ⇒ Tengo nuevos compañeros que han perdido sus trabajos y se están lanzando de lleno a este mundo. También graban escenas sexuales desde sus casas que luego suben a plataformas online, y ganan su dinero. El caché de los rodajes ha bajado porque somos muchísimos, cuando yo empecé hace 22 años podría haber mil actores de porno gay en todo el mundo, y ahora, solo en España, puede haber unos tres mil…
SHANGAY ⇒ ¿Has sacado algo positivo de la cuarentena?
MARTÍN MAZZA ⇒ Me ha servido para concienciarme y tomar precauciones cuando salgo de casa; otro confinamiento es inviable. Hemos aprendido y debemos tener más cuidado.
SHANGAY ⇒ Físicamente estás en plena forma… ¿Has trabajado mucho tu cuerpo estos meses?
MARTÍN MAZZA ⇒ Lo que más he echado en falta ha sido hacer ejercicio físico, retomar el gimnasio me ha costado, me cansaba mucho y parecía que estaba enfermo, pero ya mejor. El deporte es vital en mi vida, durante el encierro me sentía mal físicamente, mayor de lo que soy. Para las personas que somos deportistas, ese parón en seco no fue nada bueno, ha sido lo más complicado.
SHANGAY ⇒ ¿Qué es lo más importante para hacer bien tu trabajo?
MARTÍN MAZZA ⇒ Un físico estupendo está bien, pero una mente sana es fundamental. Hay que traspasar las cámaras. Yo lo hago, pongo mucha actitud. Ahora están empezando unos actores con unos miembros descomunales y están teniendo mucho tirón. El tamaño sí que importa, pero hasta cierto punto. Lo importante es tener un pene grande, un culo grande, un cuerpo bonito o una buena actitud. Cualquiera de estas cuatro cosas vale.
SHANGAY ⇒ ¿Qué significa para ti el porno?
MARTÍN MAZZA ⇒ Yo empecé en el porno porque pienso que la vida sexual es de las cosas más importantes que la gente tiene, a través del sexo se crean vínculos. No tiene nada de malo hacer porno, hay que hablar más de sexo, no debe ser un tema tabú. Hacemos lo mismo que el resto de personas, solo que con una cámara. Además, que me graben es uno de mis fetiches, me da morbo. Gracias a mi trabajo, nunca estoy deprimido, no me lo puedo permitir, porque para rodar no puedo estar depresivo o de mal humor. Lo que más me preocupa es que mi mente esté siempre sana; si estoy bien de ánimo, funciono mejor sexualmente. Que la gente no piense que el porno es algo sucio, porque no es así.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo es este mundo detrás de las cámaras?
MARTÍN MAZZA ⇒ Lo más importante es tener buen rollo, tienes que ir preparado para que el chico te guste sí o sí… Por eso somos profesionales, porque tenemos que crear un feeling.
SHANGAY ⇒ ¿Tienes pareja actualmente?
MARTÍN MAZZA ⇒ Vivo enamorado [risas], cada día me enamoro de alguien… y por eso me duran tan poco los novios. Cuando ruedo con un chico nuevo o conozco a alguien, me engancho. Pero igual de rápido que me enamoro, me desenamoro.
SHANGAY ⇒ Fuiste compañero de Macanao Torres, que falleció hace unos meses. ¿Qué puedes contarnos de él?
MARTÍN MAZZA ⇒ Yo fui quien lo metí la industria del porno, me encargaba de atender a los chicos nuevos y entrevistarlos. Macanao era un tío excepcional, muy buena persona. Hay gente que por ser buena sufre más, y Macanao es un claro ejemplo de eso.
SHANGAY ⇒ ¿Tienes algún tipo de contacto con Luis Rollán? Eráis inseparables…
MARTÍN MAZZA ⇒ Él y yo no nos hablamos por culpa de terceras personas. Éramos muy buenos amigos. Lo conocí en Ibiza, me cuidaba muchísimo, conocí a su familia, era encantador conmigo. Para mí, la relación que manteníamos sí que fue sentimental. A Luis lo echo de menos, lo quiero mucho. Me gustaría coincidir con él y poder hablar.