Crítica. 'Macbeth', un último viaje de Gerardo Vera en el Centro Dramático Nacional

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La vida depara sorpresas, algunas inesperadas como la sufrida por Gerardo Vera, que falleció a los pocos días de iniciar los ensayos de su Macbeth para el Centro Dramático Nacional. Otras esperables, como el cariño que tiene hacia su maestro el nuevo director de la casa, Alfredo Sanzol, quien como tributo a su memoria decidió recoger sus notas y tomar las riendas del montaje.

En estos tiempos de pandemia, en los que tantos miles se han marchado sin un adiós, era inevitable para el mundo que Vera dejó que se encontrara la agradable sorpresa de poder despedirse de él como debe ser: en pie, entre aplausos, lágrimas de emoción y bravos. Quién nos iba a decir que una obra tan cargada de sangre y muerte como Macbeth, el clásico de Shakespeare, se convertiría en un canto a la vida de uno de los mejores directores de la escena contemporánea…

Esta adaptación de Macbeth es de las que no se olvidan, primero por su factura. La luz magistral de Juan Gómez-Cornejo, la dramática videoescena de Álvaro Luna y el épico mundo sonoro de Alberto Granados apoyan la monumental escenografía arquitectónica firmada por Alejando Andújar. Juega con perspectivas y puntos de fuga, para traspasar su mera labor estética y convertirse en algo vivo, que con minimalistas cambios crea palacios, bosques, campos de batalla o alcobas de amantes.

La otra buena decisión en una función tan compleja, que en la didáctica versión de José Luis Collado se entiende perfectamente, ha sido hacer un teatro grupal que funciona como un reloj. Durante dos horas no hay tiempo de aburrirse, se cuentan muchas cosas y nadie descansa.

Semejante texto necesita una pareja de protagonistas que estén a la altura, y Marta Poveda y Carlos Hipólito lo están, sin duda. Ella, construyendo su Lady Macbeth desde las entrañas, y él, desde la razón y el conocimiento del personaje. Hay química en su emparejamiento, y una riqueza humana que sobresale del resto del testosterónico elenco, engrandeciendo una creación que ya nació grande, solo por servir de homenaje a un gran artista y un mejor ser humano.

⭐⭐⭐⭐⭐