Una de las pequeñas concursantes de MasterChef Junior nos ha conquistado nada más arrancar la octava edición del reality de cocina. Henar, una madrileña de 10 años, se ha metido en el bolsillo al colectivo LGTB con una frase que parece de lo más simple, pero que pone en valor su falta de prejuicios y espíritu inclusivo.
La niña se encontraba en pleno cocinado durante una de las pruebas cuando Pepe Rodríguez y Silvia Abril se acercaron a ella para evaluar su trabajo. La conversación acabó derivando en crushes –con desparpajo, Henar explicaba que es un anglicismo que se usa ahora para hablar de las personas que nos gustan “porque nos hemos vuelto todos bilingües, aunque era una palabra que no existía antes”– y en los desengaños amorosos que habría sufrido la minichef alcorconera a su corta edad. “Me han roto el corazón mil veces”, confesaba ablandando el corazón de la audiencia irremediablemente.
“¿Yo le he pedido salir a alguno y me han dicho que no”, continuaba relatando Henar sin darle mayor importancia al asunto. Sin embargo, Silvia salía al quite: “¿Sabes por qué es eso? Porque no hay ninguno que esté a tu altura”. Tan pancha, la pequeña daba carpetazo al tema, como si nada: “Ah, bueno, es que no me merecen”.
Justo después hacía la reflexión que le ha valido en Twitter apelativos como “diosa infinita”, “menuda reina” o “icono de la bisexualidad”. Henar se dirigía a cámara y decía con total naturalidad: “Ahora estoy un poco más centrada en la cocina que en ligar con los chicos o con las chicas”.
Un comentario que da normalidad a la bisexualidad y que tiene su relevancia al haberse emitido en un programa de la televisión pública, programado en prime time y en el que los protagonistas son niños. ¡Viva Henar!