¿Por qué nos cuesta tanto cambiar? Nuestro coach LGTB te acompaña en el proceso

Temas: Coach LGTBIQ+, Hazte consciente, Pedro Serrano

Vivimos en un continuo cambio: cambia nuestro entorno, cambian nuestras amistades, cambian las circunstancias, cambiamos nosotros… Todo cambia, y aun así, en muchas ocasiones nos resistimos al cambio.

Pero, ¿por qué nos cuesta tanto cambiar? ¿Qué nos lo impide?

Te diré que el primer impedimento nos lo pone nuestro propio cerebro, ya que a él no le gustan los cambios, porque suponen siempre un gasto extra de energía y esto es algo que no entra en sus prioridades, que son: la supervivencia (mantenernos vivos) y el ahorro de energía (optimizar al máximo nuestra energía y recursos). Y claro, plantearle un cambio supone sacarnos de nuestra zona de confort y emplear mucha energía para los nuevos propósitos, con lo cual hará todo lo posible para quitarnos esas nuevas ideas de la cabeza, y nos hará procrastinar siempre que pueda. Finalmente, si no ponemos voluntad, abandonaremos esa idea, ese cambio que teníamos intención de hacer.

Esta voluntad que flojea se debe, en la mayoría de las ocasiones, a que no confiamos en nosotros mismos, no nos conocemos. Somos nuestro peor enemigo, y nos apoyamos en pensamientos negativos que nos limitan y nos bajan la autoestima.

Otro tema importante es que nos focalizamos más en lo que nos falta que en lo que tenemos, nos ponemos palos en las ruedas a nosotros mismos…

Pero debo decirte que eres mucho más de lo que te cuentas a ti mismo y mucho más de lo que te han contado acerca de ti… Solo tú tienes las claves y las respuestas. Recuerda que el mayor especialista en ti eres tú.

Conocerte, explorar en tu interior, es el primer gran paso; gestionar pensamientos y emociones es fundamental y esto es un trabajo personal de autoconocimiento, de reconocer luces y sombras y trabajar en ello. Este es mi trabajo como coach personal, acompañarte en todo ese proceso.

En este vídeo te cuento cómo identificar los patrones tóxicos que nos impiden trabajar en el cambio, y también te doy perspectivas y herramientas para acometer estos cambios tan necesarios en nuestra vida personal o laboral.

Te deseo un feliz día. Hasta la próxima.