Ayer se celebraron numerosas concentraciones en ciudades de todo al país por el asesinato homófobo de Samuel Luiz, el joven de 24 años al que mató un grupo de personas en A Coruña la madrugada del pasado sábado.
La protesta de Madrid tuvo lugar en la Puerta del Sol, donde llegaron a concentrarse unas tres mil personas que, de manera pacífica, pidieron justicia para Samuel, y el fin de las agresiones y la discriminación LGTBI por parte de la sociedad y de un sector de la política española que es abiertamente LGTBIfóbico, o pacta con la ultraderecha de nuestro país.
Lo cierto es que, cada vez más, se suceden delitos de odio como el que acabó con la vida de Samuel, y se permiten discurso LGTBIfóbicos, machistas y xenófobos en redes sociales y medios de comunicación. «No hemos estado metidos en los armarios para que al salir nos metan en un ataúd», citaba una de las pancartas que se alzaban ayer tarde en el kilómetro cero de Madrid.
Al final de la concentración convocada, que se llevó a cabo sin ningún altercado, un grupo de manifestantes decidió continuar la marcha sin autorización hasta el barrio de Argüelles, donde se escucharon gritos dirigidos hacia la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso: «Ayuso, fascista, estás en nuestra lista». Fue allí donde, a las 22:20 horas, ocurrieron algunos altercados con la Policía Nacional, que impidió que los manifestantes pudieran continuar hacia Plaza de España o Moncloa.
La respuesta policial fue «desproporcionada» según algunos representantes políticos como Mónica García de Más Madrid o Íñigo Errejón, que no dudó en pedir explicaciones al Gobierno por lo incomprensible de esos ataques de los antidisturbios a los manifestantes.
No entendemos la desproporcionalidad de la actuación de la policía en estas imágenes tras la concentración pidiendo #JusticiaPorSamuel. Exigimos una explicación @MercedesDS21 . https://t.co/tpoFFmojOJ
— Mónica García (@Monica_Garcia_G) July 5, 2021
No son los únicos políticos que se han pronunciado al respecto. Juan Carlos Monedero compartió al saber la noticia del asesinato de Samuel su rechazo a Vox y a decisiones como la del alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, de no colgar la bandera LGTBI en el Ayuntamiento.
A ver si alguien me explica a qué Dios le rezan los de @VOX y los que les secundan cuando asesinan a alguien por su odio a los homosexuales. Piensa @AlmeidaPP_, que si hubieras colgado la bandera LGTBI en el ayuntamiento, el asesinato de Samuel habría sido un poco más dificil. pic.twitter.com/PhuPA4eRPS
— Juan Carlos Monedero (@MonederoJC) July 4, 2021
Un mensaje al que el propio Almeida contestó poco después.
Solo una mala persona puede banalizar un asesinato de odio.
No todo vale. https://t.co/aWgQhHQymb— José Luis Martínez-Almeida (@AlmeidaPP_) July 4, 2021
Lo que está claro es que los disturbios ensuciaron el final de una jornada triste, muy dura y emocionante en la que todo el país se unió para despedir al joven Samuel y reivindicar que el odio no puede ganar, a pesar de lo que pretende la ultraderecha. Un movimiento que también pretende abrazar a los familiares y seres queridos de Samuel, que lo han dejado claro: «No sabemos cómo gestionar esto; no queremos batallas políticas. No buscamos venganza, buscamos justicia».
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