Rozalén, estrella del Love Festival en La Palma: "Hay que reivindicar, con amor, que somos libres"

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Después de meses de incertidumbre, de pequeños conciertos en acústico y algunas cancelaciones, Rozalén ha vuelto a los escenarios. Ahora lo hace en el marco del Isla Bonita Love Festival, en la isla de La Palma. Un festival LGTBI que, contra viento y pandemia, ha logrado mantener su agenda social y su tradicional concierto. Un evento que apuesta por la visibilidad y que ha convertido a la isla canaria en referente en esta materia.

La cantante fue portada el pasado julio de nuestro número del Orgullo. Ahora, de cara al concierto que dará el próximo sábado 4 de septiembre de La Palma, (puedes comprar las entradas aquí), recuperamos la entrevista en la que nos habló de su compromiso con la comunidad LGTBI: «En el Orgullo, y siempre, hay que reivindicar con amor que somos libres». Por eso, entre otras cosas, es la estrella del LOVE Festival, amor libre, y #AmorSinEtiquetas.

Para ella es muy importante volver a los escenarios: “Ha sido lo más deseado desde hace muchísimo tiempo. Basta perder algo para saber valorarlo, es algo que siempre nos pasa a los seres humanos. Siento que el público está como nosotros, muy emocionado. Estamos todos muy a flor de piel”, nos cuenta entusiasmada en uno de los pocos ratos libres que puede sacar entre viajes y pruebas de sonido. “Siento por primera vez la luz al final del túnel, estoy de­seando que todo vuelva a la normalidad como la conocíamos antes, aunque eso tardará aún un poco”.

La albaceteña presenta en esta gira estival su último trabajo, El árbol y el bosque, un disco que llegaba después del fenómeno que supuso su anterior álbum y que, tal y como ella misma cuenta, está funcionado muy bien. “Tenía un poco de miedo por­ que habían pasado muchas cosas con el disco anterior, pero la respuesta de la crítica y el pú­blico ha sido muy buena. También nos hemos es­ forzado más que nunca porque estaba el listón muy alto. Además, es un disco muy introspec­tivo, muy de mirar pa dentro, y eso tiene mucho que ver con todo lo que hemos vi­vido”.

«Si alzas la bandera LGTBI, luego sé coherente y respeta»

Ella es una artista crítica y defensora de los derechos humanos, por eso se muestra algo decepcionada con algunos capítulos negros que ha vivido nuestra sociedad a lo largo de este último año. “La historia es cíclica, hay momentos de luz y otros de más sombra. Yo sigo pensando que la gente es buena, aunque lo destructivo es más ruidoso. Quiero pen­sar que la mayoría de la gente ama a quien tiene al lado”.

Precisamente, este mes celebramos esa libertad de amar a quien realmente queramos, un mensaje que Rozalén siempre lleva consigo “no solo en el Orgullo, todo el rato hay que reivindicar con mucho ca­riño y mucho amor que somos libres y que en el corazón nadie manda. Es imposible controlar a quién ama una persona. A veces molesta la feli­cidad del otro, y eso es algo que deberíamos mi­rarnos como sociedad”.

Esta es una bandera que ella siempre ha alzado orgullosa y que, en ocasiones, se ha visto en las manos de quienes no comulgan con el mensaje. “Lo más importante en la vida es la coherencia y la honestidad, y hacerte con la lucha de otras personas por unos votos es un poco ruin. A mí no me parece mal que alcen la bandera LGTBI si luego son co­herentes y respetan, y no se piensan que son más que nadie”.

En una ocasión, Rozalén nos confesó que, si fuera travesti, se llamaría Zorralén. Un ingenioso personaje que causó más de una carcajada entre los presentes y que, ahora que ha llegado a nuestras pantallas Drag Race España, nos encantaría ver entre los miembros de su jurado. “Esto hay que hacerlo, yo estoy abierta a todo”, nos cuenta entre risas.

Lo cierto es que su último single, El paso del tiempo, encajaría a la perfección en alguno de los desfiles del programa, y en cualquier fiesta de este verano. “Eso debería pasar, se debería bailar de todas las formas, gente de todas las edades, de todos los sentimientos… Porque es un canto a la vida, tiene mucho power”.

Razón no le falta, este es uno de los temas más bailables de la cantautora. Una canción con un mensaje tan real como necesario, y un divertido ritmo funky con el que a cualquiera se le van los pies. “La acogida por parte del público ha sido súper buena. La gente está acostumbrada a que le ofrezcamos cualquier cosa, con ritmos y men­sajes muy diferentes, saben que mi equipo y yo jugamos con la música para hacer disfrutar”.

«Sigo pensando que la gente es buena, aunque lo destructivo es más ruidoso»

El paso del tiempo no solo es el último éxito de Rozalén, también es ese fenómeno que nos hace mirar atrás con nostalgia e incredulidad, sobre todo este último año tan gris y totalmente anómalo. Unos meses que han dejado mucha tristeza, y de los que tenemos que salir con una importante lección. “Hemos aprendido a la fuerza muchísimas cosas, la vida nos ha enseñado que no estamos por encima de nada, que todo puede parar de repente, y por eso no es lógico que vivamos a gran velocidad”, nos explica. “También hemos re­conocido que la familia es lo más importante, yo no me puedo creer que me haya tirado tantos meses sin verlos. Creo que hemos vivido muchas cosas y todos nos estamos recolocando, porque nos han obligado a parar y reflexionar”.

Por suerte, poco a poco todo va cogiendo un ritmo constante, y esa reflexión de la que nos habla puede ir acompañada de música y baile, y así ocurre en los conciertos que Rozalén está ofreciendo por toda España con su gira, que la mantendrá ocupada todo el verano. “Este año no puedo irme de vaca­ciones. Quiero estar bien para ofrecer todo lo que quiero dar en cada concierto, y disfrutaré de cada ratico que tenga libre con la gente que quiero. Eso es lo que deberíamos haber apren­dido de todo esto, a valorar las cosas y ser un poco más felices”.