Las controversias sobre el Mundial de Fútbol de Qatar 2022 no paran de sucederse, y si hace unas semanas era Amnistía Internacional quien denunciaba la explotación laboral e informaba de más 6.500 trabajadores muertos en las obras, ahora ha sido la propia organización del evento quien se ha puesto en el foco de las críticas.
Nasser Al-Khater, presidente del comité organizador de la Copa Mundial de 2022, ha resaltado en la entrevista para la CNN estadounidense que en el emirato «la homosexualidad no está permitida». Por ello, ha afirmado que «las demostraciones públicas de afecto están mal vistas y esto se aplica a todos». «Qatar y los países vecinos son muchos más conservadores y pedimos a los aficionados que nos respeten. Así como nosotros respetamos las diferentes culturas, esperamos que las nuestra también lo sea», ha añadido.
A pesar de estos comentarios bastante LGTBfóbicos, el presidente afirma que se garantizará la seguridad del colectivo. Insiste en que tendrán derecho a viajar al país y asistir a los partidos. «Podrán hacer lo que haría cualquier otro ser humano», contestó a la presentadora, una frase que contradice todo lo que había comentado previamente en la entrevista.
También se le preguntó por el futbolista australiano Josh Cavallo, que recientemente salió públicamente del armario, y que ha asegurado tener miedo de ir a Qatar. Al-Khater respondió que se trata de una falsa imagen que se tiene del país: «Al contrario, le damos la bienvenida y le invitamos a que venga a conocer el emirato antes del Mundial. Nadie se siente amenazado aquí, creo que esta percepción de peligro se debe a las múltiples acusaciones y noticias que dan un panorama negativo al país«.
Ante las declaraciones del presidente del comité del Mundial de Qatar, las redes sociales se han llenado de mensajes protestando por las injustas medidas que pretenden aplicar hacia la comunidad LGTBI+. Afirman que se estarían vulnerando los derechos y libertades de este colectivo, y que no es compatible con los valores que debería promover el fútbol y el deporte en general.
El mundo del fútbol, que ya es tremendamente homófobo, se hace cómplice de Catar, un país que atenta contra los derechos humanos para que sus élites se sigan llenando los bolsillos. Es una absoluta vergüenza y un insulto para los valores que debe promover el deporte. https://t.co/oFr8O2JSWe
— Álvaro López (@a1varo_lopez) December 1, 2021
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