Esta exposición en CentroCentro de Madrid nos cuenta de dónde venimos: quiénes fueron los primeros en luchar por los derechos LGTBIQ+, como parte de un movimiento mucho mayor que abarcaba todos los frentes de la libertad.
Ocurrió en Barcelona, cuando el franquismo decaía. Y fue un movimiento radical. Ahora lo podemos recordar con Underground y contracultura en la Cataluña de los 70.
Convirtieron las Ramblas de Barcelona en un foro público. Mientras Nazario, Camilo y Ocaña se paseaban travestidos, una serie de cómics underground que se vendían de tapadillo corrían como la pólvora entre los jóvenes: participaban desde Javier Mariscal o Miguel Farriol hasta Pepicheck, miembros del grupo El Rrollo que crearon los primeros álbumes ilustrados.
Surgían revistas efímeras, como Amigos, que hablaban claramente de homosexualidad, y en el Parque Güell se hacían los primeros encuentros libertarios, que acababan en inmensas orgías al aire libre, donde las drogas, sobre todo ácidos lisérgicos, corrían como la espuma.
Pero no todo era un continuo jolgorio bohemio: se disparaba el activismo antifranquista, también el activismo de los derechos de los gais y lesbianas (incluida la lucha contra el electroshock, tan común para ‘tratarnos’ en aquellos años), del feminismo y de la despenalización de las drogas.
Proliferaban los espacios seguros y de debate, como el Café de la Ópera –para los gais–, pero también salas de conciertos con grupos de jóvenes que saltaban del rock al punk sin despeinarse.
Esta exposición recoge todo esto y mucho más, comisariada por dos personalidades esenciales de aquellos años: Pepe Ribas, fundador de Ajoblanco –la primera publicación moderna y libre de España– y Canti Casanovas, activista y propagador de comunas.
Señala Pepe Ribas, al hilo de lo que muestra Underground y contracultura en la Cataluña de los 70: “Aquella primavera de creación underground, libre y colectiva, acabaría poco después con la fragmentación del mundo contracultural, la llegada del mandarinato de los partidos políticos, la cultura de la subvención y el advenimiento de la era del Yo y la posmodernidad. Y, sin embargo, esas nuevas formas de vida fueron las simientes de las libertades civiles que hoy disfrutamos”.
Underground y contracultura en la Cataluña de los 70 se puede visitar hasta el 2 de diciembre en CENTROCENTRO (Plaza de Cibeles, 1 · Madrid)