Prende es un proyecto 360º de Eduardo Jairycovich compuesto por música, vídeo, fotos y texto.
En él, Jairycovich defiende la visibilidad de las personas queer que siguen luchando día a día por los derechos del colectivo LGTBIQ+, que no pueden ser ya invisibilizades a día de hoy.
Eduardo Jairycovich, artista multidisciplinar y activista queer, ha presentado Prende, su nuevo proyecto audiovisual tras lanzar el año pasado el libro Rito.
Rito es un poemario y fotolibro en el cual Jairycovich habla de la realidad queer basada en sus vivencias, haciendo hincapié en la importancia de expresarse mediante su cuerpo, la fotografía y la escritura.
Esta vez, Eduardo Jairycovich quería acercar al público a su universo de una manera más accesible, y así es como nace la recién estrenada Prende.
Harto de ver cómo se le rechazaba en muchos proyectos por su imagen cada vez más libre, experimental y sexual, y comprobando por otro lado que algunas entidades usaban su trabajo para blanquear la LGTBIfobia, decidió actuar.
Así que decidió embarcarse en un proyecto dedicado a t3odas las personas queer y disidentes del género que arriesgan su vida, su trabajo e incluso sus relaciones afectivas con tal de perseguir su libertad y seguir luchando por sus derechos y de les demás componentes del colectivo día a día.
Prende, primera toma de contacto del nuevo proyecto creativo del 2023 de Eduardo Jairycovich, está compuesto por un tema techno y un videoclip dirigido y producido por él mismo, en el cual participan personas de diferentes identidades, con la idea de hacer bien visible la soberanía queer.
En este trabajo, además, se puede ver la evidente importancia de la moda en la trayectoria de Eduardo, ya que ha contado con creaciones de marcas como Syndical Chamber, Syro e Untitlab, apostando por diseñadores emergentes españoles e internacionales.
También hace un guiño al controvertido cartel que diseñó para una discoteca valenciana, que le valió una denuncia por parte de los Abogados cristianos, y todo tipo de mensajes de partidos políticos extremistas, que lo tachaban de degenerado por reinterpretar a la valenciana Virgen de los Desamparados.
En Prende, el artista multidisciplinar ha querido volver a la céntrica plaza de la Virgen (donde se había hecho en su momento una «misa de desagravio») para introducirnos en una rave queer y liberadora, una explosión con la que tanto Eduardo como sus niñes prenden la ciudad con su arte.
Seguro que tendremos muchas más noticias de Eduardo Jairycovich en los próximos meses. De momento, toca disfrutar con esta celebración de la no normatividad que es Prende.