Alex di Giorgio: "Desde que salí del armario siento la responsabilidad de ser yo mismo, sin filtros"

La primavera está dejando unas temperaturas más propias del verano. Así que hay dos opciones, quedarse en casa al refugio del ventilador o coger el bañador y escapar al oasis más cercano. Esta última opción es la que eligió Alex di Giorgio en su visita a Madrid. El exnadador olímpico italiano no dudó en subir con nosotros a la terraza del Room Mate Macarena-Gran Vía, un rincón ideal para refrescarse en pleno centro de la capital.

Esta no es la primera vez que el deportista visita Madrid –quizá sí sea la más cálida–, pero nos confiesa que no le importaría venir mucho más. “Me gustaría pasar aquí un tiempo, también para aprender el idioma. Tengo muchos amigos aquí que se han mudado desde Italia, es una ciudad muy bonita, y muy divertida, que me encanta”, nos cuenta.

«El mundo de la natación no estaba preparado para que saliera del armario. fue duro, pero tuve el apoyo de mi familia, que es lo más importante»

Seguro que, si decidiera mudarse aquí una temporada, compartiría tiempo y experiencias con el waterpolista Víctor Gutiérrez, con quien tiene mucho en común. Ambos son apasionados de los deportes acuáticos y han salido del armario públicamente, un periodo que Di Giorgio recuerda con sus luces y sus sombras. “Fue una época difícil. Hace diez años, el mundo de la natación no estaba preparado para que un deportista como yo saliera del armario. Tuve que hacer un duro trabajo interno, pero estoy contento porque tuve el apoyo de las personas más importantes para mí, que son las de mi familia”, nos dice. Y explica que, aunque no encontró mucho odio, sí habría agradecido tener un apoyo dentro de la natación, alguien con quien poder compartir todo lo que sentía.

Tras participar en los Juegos Olímpicos de Londres y Río de Janeiro, el nadador decidió dejar la competición para centrarse en otro de sus sueños: ser actor. Para ello estudió Comunicación e Interpretación, y ha dado ya sus primeros pasos en televisión. “Este año participé en Ballando con le stelle [versión italiana de Mira quién baila], y lo hice con un chico. Fuimos la primera pareja gay del programa, y creo que hemos hecho algo muy grande, porque hemos mostrado algo que hace unos años era impensable”, nos cuenta ilusionado. “Cuando participas en un programa como este, sabes que cualquier cosa que hagas la ven muchísimas personas, y está la posibilidad de que este público se inspire en ti. Yo sentí la responsabilidad de ser yo mismo, sin todos los filtros que me ponía al principio. Solo así puedo transmitir lo que soy realmente, y eso es algo muy bonito. Si con esta experiencia he podido ayudar a alguna persona, ya soy feliz, he cumplido mi objetivo”, dice orgulloso, a la vez que explica la cara b de esta exposición. “Hay muchas personas que, desgraciadamente, todavía tienen necesidad de odiar y criticar, porque no aceptan la diversidad y la libertad, pero cada vez son menos”, continúa.

«Si no hablas de tu orientación sexual, no ayudas a esa gente que quiere ser libre de poder ser quien es»

Y es que, si comparamos con nuestro país, Italia aún tiene que dar unos pasos más en cuestión de igualdad de derechos y diversidad. “Allí todavía se tiende a decir lo menos posible acerca de tu orientación sexual, por miedo, y es algo que no me gusta nada, porque así no ayudas a esa parte del público que quiere ser libre de poder ser quien es. Veo que todavía falta mucho por hacer”, se lamenta, aunque no pierde la esperanza en el futuro.

En ese mañana habrá menos LGTBIQfobia, y puede que Alex di Giorgio haya cumplido su objetivo de ser actor. “Me gustaría hacer una película, o una serie de televisión. Me encantaría hacerlo con Ferzan Özpetek, uno de mis directores favoritos. Pero, en general, entrar en este mundo sería cumplir el sueño que tengo desde que era pequeño”, nos confiesa. Solo queda esperar algún tiempo para ver su nombre entre el reparto de alguna ficción. Mientras tanto, con este calor, mejor seguir refrescándonos en las piscinas de Madrid.