Merche: "Voy a gritar hasta la muerte que todos somos iguales y libres"

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No es fácil mantenerse en la palestra durante más de veinte años. Para eso hay reinventarse y adaptarse a los nuevos tiempos y sus ritmos. Han pasado casi 22 años desde que Merche se diera a conocer con No me pidas más amor, su primer éxito, con el que consiguió hacerse un hueco en un momento en que la industria musical estaba opacada por el fenómeno Operación Triunfo. Desde entonces, la cantante ha cosechado éxitos como Abre tu mente, Cal y arena, Eras tú y Si te marchas, ha hecho diez giras por España y ha participado en programas de televisión como Tu cara me suena. Ahora, en un mundo nuevo de TikTok donde el que manda es el algoritmo y el consumo rápido, la gaditana se ha convertido en viral gracias a Mi amiga María, su último éxito, que sirve como segunda parte de Le deseo, uno de sus primeros temas, y que es una de las canciones del momento por su baile, su rima, su «fotopo» y su melodía adictiva.

Merche está de plena actualidad, porque además de este éxito y su reciente canción Contigo, dedicada a los niños que han sufrido abusos sexuales, está en los escenarios con su gira 20 aniversario. Y como un torbellino de luz, alegría y mucho arte, la cantante nos visita para poder charlar sobre su fenómeno viral, su nuevo proyecto y su lucha por los derechos LGTBIQ+.

SHANGAY ⇒ ¿Cómo has vivido este fenómeno viral de Mi amiga María?
MERCHE ⇒ Encantada de la vida. Parece mentira que después de 22 años este mundo de la música me siga sorprendiendo. La reacción ha sido brutal y la gente se lo ha pasado pipa, que es lo más importante. Lo que he conseguido con esta canción es muy difícil, porque la gente ya me conoce mucho y sabe cómo canto y compongo, así que llamar la atención otra vez es muy complicado, aunque siempre intente hacerlo de alguna manera y probar cosas nuevas. Aún me quedan muchas cosas que contar y muchas canciones por cantar, y me encanta poder seguir haciendo baladas más sentimentales y canciones más divertidas.

SHANGAY ⇒ ¿Por qué esta revisita a tus temas clásicos?
MERCHE ⇒ Hace nada cumplí veinte años de carrera, que se dice pronto, y me apetecía enfrentarme de nuevo a esas canciones que tan feliz han hecho a la gente. Ahora estoy con mi gira 20 aniversario, y el próximo año seguiré con ella y daré una serie de conciertos exclusivos en salas de teatro. Así que, en todo este homenaje que me estoy dando a mí misma, quería hacer un regalo a la gente que me ha seguido todo este tiempo… y así surgió este proyecto tan bonito. Al principio iban a ser dos o tres canciones, pero después de ver lo que está gustando voy a hacer un álbum con mis canciones remasterizadas y sus respectivas segundas partes.

«Hay un montón de niñas como Aitana, Ana Mena y Lola Índigo, que son las dueñas de sus carreras»

SHANGAY ⇒ Además de una estupenda cantante, eres también una gran compositora… ¿Te sientes valorada por esa faceta?
MERCHE ⇒ Ahora sí, pero hubo un momento en que me costó mucho que me tomaran en serio. Antes, quitando a Mari Trini en su momento o Rosana ya más en mi época, no había tantas mujeres compositoras, y las que había tenían un perfil muy distinto al mío. Ahora las cosas han cambiado y ya no se cuestiona a una chiquilla con su pelo rubio y su minifalda si lidera o no su proyecto. A mí siempre me preguntaban por el hombre que estaba detrás de mi música, cuando la que hacía mis temas era yo. Incluso la compañía discográfica me decía que tenía que vestir más sobria y yo me rebotaba y hacía todo lo contrario, el pelo más rubio y la falda más corta. Ahora, gracias a Dios, se han abierto muchas puertas y hay un montón de niñas como Aitana, Ana Mena y Lola Índigo, que son las dueñas de sus carreras.

SHANGAY ⇒ ¿Has sentido la presión de actualizarte en este nuevo mundo de TikTok?
MERCHE ⇒ Es una locura cómo funcionan las cosas ahora. La industria ha cambiado muchísimo en todo este tiempo y hay que estar muy pendiente de las tendencias y de cómo se consume la música. Afortunadamente, yo tengo a mi niña de 13 años que, claro, ella está en la edad de todo eso, y yo la veo ahí haciendo sus bailecitos y viendo vídeos…, y más o menos me entero de las cosas. Pero sí que es una herramienta que, si sabes usarla, es una gran oportunidad para enseñar tus canciones, abrirte más en público o incluso para colgar actuaciones antiguas y que la gente más joven las pueda descubrir. Las redes tienen sus cosas malas y sus cosas buenas, pero lo mejor es que son un puente entre el artista y sus seguidores, y eso ellos lo agradecen mucho.

SHANGAY ⇒ Abre tu mente se ha convertido en todo un himno para muchas personas, y trataba sobre la violencia de género en un momento en el que aún no se hablaba demasiado del tema… ¿Harías una segunda parte con la perspectiva de ahora?
MERCHE ⇒ Por supuesto. Cuando saqué Abre tu mente muchas personas no sabían que hablaba de la violencia de género, imagino que porque no es la típica balada sentimental. Yo quise hacer una canción con la que pudieras bailar y gritar a los cuatro vientos que quieres ser libre, porque el tema ya es bastante duro y desagradable. Y con los años sí, se ha convertido en un himno y cada vez que la canto en directo es un momento de total libertad.

«Me siento parte del colectivo LGTBIQ+»

SHANGAY ⇒ También por la igualdad y la tolerancia hacia muchas personas LGTBIQ+…
MERCHE ⇒ Es muy fuerte lo que estamos viviendo. Tengo la sensación que hemos avanzado un montón pero, de repente, otra vez estamos yendo para atrás. Como no nos pongamos manos a la obra caemos en picado otra vez, no podemos quedarnos calladitos. Yo me siento parte del colectivo LGTBIQ+, así que vamos a movernos porque parece que ya está todo dicho pero no es así, hay que seguir reivindicando una y otra vez. A estas alturas de la película tenemos que volver a repetir que todos somos iguales, porque hay por ahí algunos que quieren arrebatarnos todo lo conseguido… ¡Pues de eso nada! Aquí está una que va a gritar hasta la muerte que todos somos iguales y libres de ser y hacer lo que nos dé la gana, siempre con tolerancia y respeto. Al de enfrente qué le importa cómo yo sea, es que no lo puedo entender. Así que nada, hijo, nos toca seguir luchando.