Este fin de semana, Manuel Santos, conocido en Instagram como @twogayspapas, denunciaba la situación homófoba vivida en el camping San Jorge de Huesca junto a su marido y sus dos hijos. Al llegar, el empleado del camping tuvo dudas sobre la situación de los menores al comprobar sus DNIs, por lo que llamó a la policía nacional. Los agentes se presentaron allí y les pidieron la documentación para comprobar si realmente eran sus hijos: “¿Pero son adoptados, de un matrimonio anterior? ¿Están ustedes divorciados?”, preguntaron delante de los menores.
Manuel y su marido proporcionaron el DNI de sus hijos, y los policías pudieron comprobar que los apellidos coincidían, algo que el empleado ya había podido ver desde un primer momento. Uno de los policías le comenta a Manuel, apartándolo de los niños: “El hombre del camping ha denunciado porque eso le parecía raro y creía que estaban secuestrando a dos niños”.
“¿Se puede ser más homófobo, más mierda de persona?”, se pregunta Manuel en el vídeo que ha subido a redes denunciando los hechos. Explicó que sus hijos no durmieron esa noche porque estaban muy asustados debido al encuentro con la policía. “Papá, por favor, vámonos de aquí”, dijeron.
El hombre, al borde de las lágrimas, señalaba lo vergonzoso que había sido tener que justificar delante de sus hijos que realmente eran suyos. “Esto a una pareja heterosexual en la vida le pasaría”. Además, aseguró que “por cosas así seguimos luchando y visibilizando nuestra familia, por cosas así y personas así seguimos celebrando el Orgullo, para que nadie del colectivo tenga que vivir este tipo de situaciones vergonzosas, porque en el 2024 y en España, esto no debería pasar”.
Una situación que le hizo recomendar a sus seguidores de Instagram no ir al camping de Huesca.
Al enterarse de lo ocurrido, Lorena Orduna, alcaldesa de Huesca, los visitó acompañada de dos concejales para pedirles perdón por lo sucedido. Se disculpó en nombre de todos los oscenses, les regaló pañoletas verdes de San Lorenzo y les invitó a quedarse en las fiestas o regresar en otra ocasión.
El Ayuntamiento de Huesca ha hecho pública una declaración en la que “lamenta la situación generada y rechaza cualquier tipo de trato discriminatorio” y ha aclarado que el camping está gestionado por una empresa y que los empleados no son municipales. “El Ayuntamiento quiere subrayar que estas actitudes no corresponden ni al sentir de la generalidad de los oscenses ni a una ciudad acogedora y hospitalaria”.
Manuel ha querido aclarar que volverán a la ciudad, pero que en ningún momento nadie de la instalación se ha disculpado ni les han devuelto el dinero o les han ofrecido la devolución de lo pagado.
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