Una joven fue agredida durante las fiestas de Valladolid, en la madrugada del 1 de septiembre, cerca de la plaza Fabio Nelli. Según la información que ha proporcionado la Fundación Triángulo, un hombre, acompañado de otros dos, se acercó a la chica y le preguntó su nombre. Tras recibir respuesta, le propinó un puñetazo mientras gritaba “lesbiana de mierda” y se dio a la fuga.
Algunos de los testigos de esta agresión ayudaron a la víctima llamando a los servicios de emergencias y a la policía, mientras que otros intentaron perseguir al agresor y a sus acompañantes. Finalmente, fue detenido por la policía.
La agresión fue tan violenta que la víctima ha sufrido una doble fractura de mandíbula, por lo que tuvo que ser hospitalizada e intervenida quirúrgicamente de manera inmediata. Como consecuencia, no podrá hablar durante las próximas semanas y deberá alimentarse mediante una pajita durante al menos un mes y medio, en lo que será el inicio de una larga recuperación.
A través de WhatsApp, el único medio de comunicación que podrá usar en las próximas semanas, la víctima compartió su testimonio: “Gracias a Dios unos chicos en el momento del puñetazo giraron la esquina, les siguieron mientas otro chico se quedó a ayudarme. Se coordinaron con la policía y les localizaron, si no, se hubiesen ido a casa contándoselo entre risas como una anécdota más”. La joven lamentó que los agresores dieran por hecho que era lesbiana por su corte de pelo, el desencadenante del ataque. “Decidieron que podían agredirme solo por mi aspecto. ¿Qué habría pasado si mi pelo fuera largo?”, se preguntaba.
Además, se ha quejado de que a las mujeres se les enseñe a defenderse y a actuar ante este tipo de agresiones y que no se insista en educar a los hombres para no realizar estas acciones, y explica que desde pequeñas a las mujeres se les dice cómo vestir o maquillarse o se les avisa de ir siempre con las llaves en la mano cuando van solas por la calle: “Luchamos continuamente por no vivir con miedo precisamente por gente así, pero a mis 21 años de vida me parece imposible irme sola a casa otra vez”.
Por otra parte, la Fundación Triángulo manifiesta su preocupación por el incremento de delitos de odio por motivos de orientación sexual e identidad de género que se están llevando a cabo durante los últimos meses y años. Piden a la ciudadanía que, ante cualquier agresión, colabore en la identificación y detención de los autores. “Este tipo de delitos de odio están siendo normalizados e impulsados por las posiciones de ultraderecha que, cada vez más extendidas, rechazan la diversidad y niegan la igualdad de derechos a un parte de la ciudadanía”, afirman desde la fundación. Y también subrayan la urgencia de erradicar estos discursos de odio y defender los Derechos Humanos de todos y todas.
Finalmente, han manifestado su total apoyo a la víctima y su familia, y le desean una pronta recuperación.
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