David Afkham: "La Orquesta y Coro Nacionales son dos de los conjuntos de mayor calidad de Europa"

La Orquesta y Coro Nacionales de España es una de las instituciones musicales más prestigiosas de nuestro país. El maestro David Afkham está vinculado a ella desde 2014, y es su director titular y artístico desde 2019. Esta temporada 25/26 es la última que lleva su sello, pues desde el año que viene será Kent Nagano quien esté al frente. Hablamos de palabras mayores, siempre con las mejores batutas del mundo al mando, como lleva siendo desde que se crearon en 1937, la orquesta, y en 1971, el coro.

También fueron palabras mayores con las que comenzaron la temporada el pasado 3 de octubre: un Wozzeck que hizo temblar los cimientos del Auditorio Nacional de Música, sede de la OCNE, y donde casi cada fin de semana estrenan unos fascinantes programas en sesiones de viernes, sábado y domingo con los principales directores de orquesta del mundo a la batuta.

“Comenzar la temporada con Wozzeck ha sido, sin duda, un sueño hecho realidad. Hemos continuado el camino de óperas en concierto tras Fidelio, de Beethoven; El holandés errante y Tristán e Isolda, de Wagner; Salomé y Electra, de Strauss; y El castillo de Barbazul de Bartok. Tras ellas, yo, realmente, quería hacer Wozzeck. Es una de las obras más importantes del siglo XX, pero, también, un grandísimo reto. Una ópera con una partitura muy compleja, pero que es perfecta para una orquesta como la OCNE, con una gran capacidad de responder a retos artísticos como esta obra maestra de Alban Berg. Es uno de esos títulos en los que la orquesta tiene un gran protagonismo, un rol de muchísima importancia”, nos asegura.

La ovación de público en esas tres funciones memorables fue impresionante. Y alabada por la crítica de forma unánime: “Estoy muy contento con el resultado de este primer proyecto de la temporada, y de cómo fue recibido por la crítica y la audiencia. Todos hicieron un trabajo increíble: la parte administrativa, el coro y la orquesta. Tuvimos unos solistas de primer nivel que elevaron el concierto a cotas excepcionales. En palabras de Wagner, ‘la obra de arte total’. Y esto es solo un ejemplo de nuestra manera de entender el teatro musical”.

Tras más de diez años vinculado a las dos formaciones, puede ver con perspectiva la evolución artística que han vivido: “Ambos, orquesta y coro, tienen alma, un sonido único, inimitable. Creo que los dos conjuntos han mejorado en calidad de manera significativa. Hemos hecho un gran trabajo como equipo gracias a la grandísima profesionalidad de todos y cada uno de los músicos que los forman, y al amor y entusiasmo que ponen en este proyecto musical. Estoy muy contento y orgulloso de la espectacular evolución, tanto de la orquesta como del coro, a la hora de afrontar nuevos repertorios. Y, últimamente, del nivel que hemos adquirido. Y, para mí, lo más importante es que hemos hecho ese trabajo todos de forma conjunta”.

Esta temporada deja la titularidad de la OCNE. Son obligadas dos preguntas: ¿Cuál es su mayor logro en estos años? ¿Seguirá existiendo vinculación con ellos? “Al margen de las numerosas experiencias excepcionales musicales con la OCNE, creo que el logro más importante es haber crecido juntos como compañía y como una familia. Eso significa que hemos aprendido a escucharnos y que hemos creado un modo de trabajo que hizo, de forma placentera, que adquiriésemos altísimos niveles de creación musical. Juntos conseguimos algo muy especial: crear lazos de intimidad sin palabras, algo así como una especie de conexión espiritual”.

A la segunda pregunta nos responde: “La OCNE es mi familia musical y siempre estaré conectado con ellos de una manera u otra. Ha sido un verdadero regalo ser su director durante estos años, y estaré muy feliz de venir a hacer música aquí en el futuro. Siempre estaremos unidos en el corazón”.

El maestro Afkham es una de las batutas más importantes del planeta y se sube al podio de las mejores orquestas del mundo. ¿Cómo se percibe el trabajo de la OCNE desde fuera? “Pienso que podemos decir, sin la menor sombra de duda, que la Orquesta y Coro Nacionales de España son dos de los conjuntos de mejor calidad artística de Europa. Pero también es cierto que tenemos que seguir trabajando en tener más visibilidad, para que así cada vez más gente pueda descubrir nuestros logros musicales. Justo ahora, al final de mi etapa, el mercado internacional se nos está abriendo mucho más como resultado del trabajo que hemos hecho durante este tiempo”.

«Adoro la pasión con la que el público español disfruta de la música»

Como alemán cosmopolita, acostumbrado al público centroeuropeo, supuestamente muy cultivado y uno de los mejores para la música sinfónica, ¿cómo se ve, desde esa perspectiva, al público español?: «Bueno, vivimos en un mundo que cambia muy rápidamente. No podemos generalizar y menos en cuestiones como esta. Pero, sin duda, puedo afirmar que estoy sumamente feliz con nuestro fantástico público del OCNE en Madrid, y también cuando tocamos en otras ciudades de España. Existe una fuerte conexión con nuestro público y eso me llena de alegría y gratitud. Y créeme, los músicos de todo el mundo admiran al público español por su conocimiento y su comportamiento«.

Afkham describe a su orquesta y coro como “mi familia musical”. Para él, ambas formaciones “son dos de los conjuntos españoles musicales más destacados para afrontar proyectos complejos de manera magistral, tanto por su técnica como por su nivel artístico”.

¿Se sienten queridos la orquesta y el coro en nuestro país? ¡Sin duda! El público español es maravilloso. Adoro la pasión con la que disfrutan de la música, y el cariño que recibimos después de cada concierto. La calurosa bienvenida que recibo siempre antes de subirme al podio es algo que mantendré en mi memoria para siempre”.