La cantante mexicana Paulina Rubio vuelve a estar en el punto de mira. En esta ocasión, debido a una pequeña metedura de pata por su parte. Algo que su exmarido, Colate Vallejo-Nágera, ha visto como «suficiente» para pedir la custodia de su hijo de ocho años, Andrea Nicolás.
En un directo de Instagram, la artista afirmó haberse sometido a un test de drogas tras las afirmaciones sobre el consumo de cocaína en el concierto One World: Together at Home, en California. Quiso demostrar que estaba completamente limpia, pero se ha acabado sabiendo que dio positivo en THC durante el concierto (aunque en California el consumo de marihuana está permitido).
Colate, tras enterarse del suceso, ha declarado que le parece absurdo haberse sometido a un test de drogas. «Nadie le ha pedido que se haga un análisis de drogas», y señaló también: «He sacrificado muchas cosas para que mi hijo tenga a su papá y a su mamá cerca, y así voy a seguir».
El «ambiente tóxico» que describió Colate con respecto a Paulina Rubio terminó siendo desestimado por el juez. Sin embargo, Rubio está advertida de que no puede consumir ningún tipo de sustancias estupefacientes delante de su hijo, y su test servirá de prueba para el próximo juicio, previsto para el 22 de julio. ¿Qué acabará sucediendo con la custodia del pequeño Andrea Nicolás?