Desde el domingo pasado, tras la emisión del tercer capítulo de Drag Race España, tenemos mal sabor de boca por el abandono de Inti, que se negó a hacer el lip sync final, y por la lluvia de críticas que ha recibido Arantxa Castilla-La Mancha en redes sociales al ser salvada con un look –supuestamente– mucho peor.
Ana Locking, miembro del jurado, afirmó que el look de Inti era muy simple, a pesar de llevar una extensible capa y un colorido tocado inspirado en sus raíces bolivianas, y que el vestido blanco que llevaba debajo con botas altas no estaba suficientemente elaborado. Esta valoración le pareció injusta a Inti, que decidió abandonar el programa de inmediato.
En las redes sociales, los seguidores del programa no dudaron en dar su opinión y muchos consideraron inmerecida la salvación de Arantxa Castilla-La Mancha. Desgraciadamente, muchos haters la atacaron salvajemente y se ha formado una gran polémica viral, que ha afectado mucho a la drag.
Arantxa Castilla-La Mancha ha manifestado en sus redes que está recibiendo “insultos y amenazas de muerte”, y que el dolor que le han ocasionado las críticas le ha recordado al bullying que sufrió cuando tenía 16 años. Denuncia, además, que el acoso viene esta vez desde el propio colectivo: “Sentí esto cuando tenía 16 años y acabé en el hospital. La única diferencia es que esta vez el acoso viene de dentro de la comunidad”.
https://twitter.com/ArantxaCLM/status/1404428986000805889?s=20
También ha recibido mensajes de apoyo de sus compañeras de concurso y de la propia Inti, que ha declarado: “Atacándola no conseguís nada, parad”. Pero Arantxa no ha dudado en decir que desea que llegue el final del concurso para que cesen las críticas, y que ahora desea descansar de las redes sociales tras este amargo episodio. “Me habéis roto, no puedo más”, ha sentenciado.