La final del campeonato de fútbol americano tendrá lugar el 12 de febrero de 2023 en el State Farm Stadium de Glendale, en Arizona.
El último álbum de Rihanna vio la luz en 2016, y sus fans han interpretado su actuación en la Super Bowl como el regreso de la cantante a los escenarios. Sea como sea, estamos seguros de que la performance de Rihanna va a marcar un antes y un después en la música. Su versatilidad, sus grandes éxitos y su carisma convertirán el show en un espectáculo inolvidable. Por ello, hoy analizamos las cinco razones por las que Rihanna es la mejor anfitriona posible de la Super Bowl.
Una larga trayectoria musical
Rihanna comenzó a trabajar en la industria musical en 2003, año en que fue descubierta por el productor Evan Rogers. Entonces, la artista formaba parte de un grupo con dos compañeros de clase, y los tres consiguieron una audición con el productor.
La voz de Rihanna dejó ensimismado a Rogers y concertó una segunda audición solo con ella. Posteriormente, la invitó a Estados Unidos para grabar la maqueta de lo que después sería su primer álbum: Music of the Sun.
En 2005 firmó un contrato de grabación de seis discos con el rapero Jay-Z, con quien sacó su primer single, Pon de Replay, y el disco Music of the Sun. En 2006 publicó su segundo álbum, A girl like me, que contiene éxitos como Unfaithful o Kisses Don’t Lie. A lo largo de su carrera musical, no dejó de triunfar con hits como Don’t stop the music, Umbrella o Love the way you lie.
La extensa experiencia de Rihanna en la música le ha dado unas tablas que no tienen artistas más jóvenes. Esto la convierte en una muy buena candidata para actuar en la Super Bowl.
Performances brillantes
A lo largo de su carrera musical siempre ha ofrecido espectáculos inigualables. Se recuerda especialmente su show en los VMAS de 2016, donde interpretó un medley de Don’t stop the music, Only girl (in the world), We found love y Where have you been.
Brilló también en el desfile de Victoria Secret de 2012, donde cantó Diamonds, o en los BRIT Awards de 2016, cuando interpretó Work con el rapero Drake.
En sus espectáculos, Rihanna logra un trabajado baile con una voz que no desafina ni una sola vez. Por ello es perfecta para la Super Bowl, un show que requiere quince minutos de baile y voz, y en el que no se puede gozar de ningún descanso.
Vuelve la ilusión por el intermedio de la Super Bowl
Estos dos últimos años, la actuación musical de la Super Bowl ha sido una decepción para los fans del evento.
En 2021, un año marcado por la pandemia, The Weeknd puso las expectativas altas, pero se quedó a medio gas en un espectáculo que no hacía justicia al presupuesto que aseguraba haberse gastado.
Por su parte, el intermedio de 2022 pasó sin pena ni gloria y ya apenas se recuerda a Eminem, Snoop Dogg, Dr. Dre, Mary J Blige y Kendrick Lamar interpretando un medley de sus temas de rap.
La confirmación de Rihanna en el intermedio de este año supone la vuelta de la ilusión para aquellos que no pueden dejar de ver la actuación de Shakira y Jennifer López en 2020. Se espera un espectáculo a la altura de estas dos artistas, que dejaron el listón muy alto en su interpretación.
Este año, todos vamos a estar pendientes de la Super Bowl. Por un lado, es fácil decepcionarnos…, pero por otro, es Rihanna: es difícil que nos decepcione.
La vuelta de Rihanna a los escenarios
La de la Super Bowl será la primera aparición musical de Rihanna desde que actuó en los Grammy de 2018. También será su primera actuación después de haber tenido a su primer hijo con el rapero ASAP Rocky.
Por tanto, la expectación aumenta, ya que hace mucho que no se la ve subida en un escenario. Todos estaremos pendientes de su actuación y de lo que pueda conllevar. El público no faltará a la cita. ¿Quizá después de esto anunciará nueva música?
Invitados de lujo en la Super Bowl
Recordemos que en la Super Bowl, los artistas anfitriones suelen llevar invitados que animan el show aún más. Por ejemplo, Beyonce cantó con Kelly Rowland y Michelle Williams (con las que formaba el grupo Destiny’s Child), y Shakira llevó a Bad Bunny para cantar su éxito Callaíta.
Rihanna ha colaborado con muchos artistas de renombre a los que podría invitar al evento. Entre ellos, DJ Khaled, Drake (con quien mantuvo una relación), Jay-Z o Kanye West. Cualquiera de ellos animaría aún más el espectáculo de la artista y generaría furor en el público (aunque con ella sola nos basta y nos sobra, desde luego).
La Super Bowl tendrá lugar en febrero, y Rihanna ya está ensayando la que sin duda será una actuación memorable. A pesar de los memes en redes de que el intermedio será “un anuncio de quince minutos de Fenty Beauty”, estamos seguros de que el show traerá de vuelta a Rihanna al mundo de la música, del que nunca se debió ir.