Uno de los retos más populares y complicados de Drag Race España puso fin al concurso de una de las chicas de la quinta temporada. El Snatch Game le jugó una mala pasada a Nix, Alexandra del Raval y Krystal Forever. Nix fue finalmente salvada por Margarita Kalifata gracias al poder del corazón, y es que, como bien dice Supremme De Luxe, “el amor, con amor se paga”.
Alexandra del Raval y Krystal Forever se enfrentaron en un lipsync “a vida o muerte” con la canción El hombre del piano, de Ana Belén. Lo dieron todo, hubo sentimiento, emoción y mucho talento sobre el escenario, pero los jueces tenían que expulsar a una de ellas, como cada semana. Krystal Forever tuvo que decir adiós al programa de su vida, mientras Supremme se despedía de ella visiblemente emocionada.
Krystal es la RuPaul española, o más bien la RuPaul venezolana, porque es de Caracas, aunque lleva en España veinticinco años. Se queda con las cosas buenas de su paso por el programa porque para ella esta ha sido “una experiencia única”. Tiene el sueño de conocer algún día a RuPaul en persona, para que la reina absoluta del universo drag pueda ver el parecido que tienen. Hemos hablado con Krystal, cuyo nombre real es Eddy Piñero, en una entrevista sincera y llena de amor por el arte travesti.
«Cuando empecé a leer comentarios duros tuve que parar, porque te pueden hacer daño»
SHANGAY ⇒ ¿Era un sueño para ti entrar a Drag Race España, ya que encima te pareces muchísimo a RuPaul?
KRYSTAL FOREVER ⇒ Así es. En el año 1994 empecé a hacer de RuPaul porque mi mentor en Venezuela me habló de ella cuando sacó la canción Supermodel (You Better Work). Me puse una peluca rubia y vi el parecido que teníamos, y ya me quedé rubia para toda la vida [risas]. Soy muy fan de RuPaul. Llegué a ser imagen de Mac, para los labiales de Viva Glam, como personaje de RuPaul en Venezuela, y también en la primera tienda de Mac que se abrió en Madrid, fue una locura. No he podido conocerla aún, pero nos conoceremos, seguro.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo ha sido la experiencia en el programa?
KRYSTAL FOREVER ⇒ Me hubiera gustado seguir demostrando quién soy, toda la experiencia que tengo como artista. Al ver el programa he tenido sentimientos muy encontrados, porque ha habido momentos en los que he discutido mucho y no me ha gustado verme así. Traté de divertirme, pero he sido un poco malita… En el segundo capítulo lo pasé muy mal; estoy operada del estómago y hubo un momento en que esto me afectó y me puse muy nerviosa… Me quiero quedar con lo bueno, porque es una experiencia única y había que aprovecharla.
«Las discusiones son cosas que ya han pasado, nos estamos apoyando mucho»
SHANGAY ⇒ Se te ha visto discutir mucho con algunas de tus compañeras. ¿Cómo has recibido las críticas?
KRYSTAL FOREVER ⇒ En este trabajo hay que aprender de los comentarios buenos y de los malos. De todo intento coger la mejor parte, incluso de los haters. Cuando empecé a leer comentarios duros tuve que parar, porque te pueden hacer daño. Invito a la gente a que me conozca un poco más, que venga a verme a mis shows…, siempre soy muy cercana con el público. Hay que abrir un poquito la mente y pensar que Drag Race España también es un reality, que tenemos mucha presión por la competición y que no estamos en nuestra casa.
SHANGAY ⇒ ¿Qué tal estás ahora con tus compañeras?
KRYSTAL FOREVER ⇒ Superbién, nos estamos apoyando mucho. Las discusiones son cosas que ya han pasado. He sido completamente real; soy una persona calmada pero tengo momentos en los que me enervo y sucede lo que se ha visto, que grito y discuto, pero cuando cometo un error sé pedir disculpas. Con Nix ahora está todo bien.
SHANGAY ⇒ ¿Estás de acuerdo con las críticas del jurado? El Snatch Game te jugó una mala pasada…
KRYSTAL FOREVER ⇒ Creo que faltó un poquito de empatía por parte de mis compañeras. No quise pisar a nadie, y eso no era motivo para que se me tiraran encima. Es cierto que cada una tenemos un estilo totalmente diferente, y a mí la comedia me cuesta muchísimo; admiro a las compañeras que tienen ese don. Mi fuerte es bailar, coser, maquillar, peinar, hacer un playback… El que es abogado no es jardinero, y el que es jardinero no es abogado.
SHANGAY ⇒ Supremme se emocionó cuando tuvo que decirte “sashay, te vas”. ¿Os conocíais?
KRYSTAL FOREVER ⇒ Sí. Hemos trabajado juntas varias veces, y el contacto de los camerinos hace que le cojas afecto a las compañeras. Nos apreciamos mutuamente.
«Estoy preparando mi primer single, se va a llamar Pasivorra«
SHANGAY ⇒ ¿Cómo recuerdas al pequeño Eddy?
KRYSTAL FOREVER ⇒ Era muy tímido, aunque me gustaba mucho bailar y actuar. Fue una época muy difícil para mí en Venezuela, porque mi padre era militar, y tener un hijo bailarín era como algo un poco prohibido. Con 15 años ya empecé a hacer mis cositas; ya no vivía con mi padre, sino con mi madre y mis hermanas. Empecé a bailar en academias y tenía una tía que era actriz; me iba con ella a la tele y al teatro, y me ponía con los bailarines a practicar. Cuando comencé a hacer drag, perfeccioné mucho la técnica del maquillaje y pude trabajar para una discográfica y en televisión. Maquillé a Rebeca, Thalía, Patricia Manterola, Paulina Rubio…
SHANGAY ⇒ Más tarde te viniste a España..
KRYSTAL FOREVER ⇒ En el año 2000. He trabajado en muchísimos sitios, pero sobre todo en locales de Chueca. También he viajado mucho, porque normalmente trabajo en un cabaret en Hamburgo, uno de los más antiguos de Europa en cuanto a drag shows. Además, trabajo en una empresa de espectáculos que hace tournée por Alemania. Ser drag queen no es para mí una diversión, es mi trabajo principal, y aunque también he trabajado como maquillador, para mí el drag lo es todo: la magia del escenario y hacer disfrutar a la gente es algo muy bonito. Soy de las artistas que van a morir en un escenario.
SHANGAY ⇒ ¿Qué proyectos tienes?
KRYSTAL FOREVER ⇒ Estoy preparando mi primer single, se va a llamar Pasivorra, que es una palabra que dije en el Snatch Game como Celia Cruz. Es una canción con las palabras icónicas que he dicho en el programa. Y actualmente estoy trabajando en La Lulú Showbar, en Chueca, e invito a la gente a que venga a verme.
