El gaymer (juego de palabras que combina las palabras ‘gay’ y ‘jugador’) está de enhorabuena. Después de que saliera a la luz Pridefest, el primer videojuego gay, ya tenemos aquí la Gaystation, una consola decorada con los colores característicos de la comunidad LGTB, fruto de una campaña benéfica durante el Orgullo de Estocolmo.
Se trata de la versión gay de la nueva Playstation 4 de SONY, creada y modificada solo en lo estético para apoyar los derechos y libertades individuales no solo de los suecos, también del resto del mundo. Será subastada el 2 de agosto a través de una página web, y el dinero recaudado será destinado a la asociación RFSL, que lucha por la tolerancia y contra la discriminación homofóbica. Refugiarse para escapar de la realidad ahora debe ser un orgullo.
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