Por todos es sabido que Dulceida no es la persona más querida en Twitter, pero tampoco en Wikipedia. A pesar de que lo hayan modificado, la web describía a la influencer de manera un tanto agresiva e insultante.
“Parásita”, “mediocre”, «parásito» o “sin hacer nada”, son algunos de los comentarios que contenía la biografía de Aida Domenech. Gracias a las capturas que compartieron usuarios de Twitter, podemos seguir leyendo la antigua reseña sobre la bloguera.
Las gafas de sol, Wikipedia, las modelos «curvy» que resultan no serlo, el “In my feelings challenge”… Son solo algunos de los últimos debates en los que se ha visto involucrada.
Dulceida haciendo el challenge de «In my feelings» pic.twitter.com/TBIDahbp7w
— Fat&Furious Miss Vanjie (@Mr_Furious10) 24 de julio de 2018
Recordando la polémica de las modelos, la catalana defendió la diversidad de cuerpos con un vídeo que se hizo viral en Youtube, en el que desnudaba a influencers como Laura Escanes o su mujer Alba Paul. Sin embargo, no predica con el ejemplo en su marca de ropa, para la que elige a los cuerpos “perfectos” “de siempre”.
Febrero: Dulceida viral pidiendo la normalización de todos los cuerpos.
Junio: Also Dulceida presentando modelos de su firma. pic.twitter.com/4Q1ZkmeaUO— P. (@lildistortion) 5 de junio de 2018
Se define como “dreamer” en la descripción de Instagram, y tendrá que seguir soñando con el día en el que deje de ser cuestionada por cada movimiento que haga. Es el precio que paga por ser un personaje público que vive de su imagen, aunque no parece estar dispuesta a seguir haciéndolo. En junio borraba su cuenta de Twitter y, de momento, no la ha recuperado.