Homófobo, racista, xenófobo… Esto son solo algunos de los calificativos que le han soltado. El Ministro italiano Matteo Salvini tiene el mérito de enfadar a muchas comunidades en una sola intervención. Con un discurso ultraderechista e intolerante, el político se ha visto envuelto en numerosas polémicas en los últimos meses.
La última perla ha sido salir en defensa de «la familia natural» y afirmar que «ejercerá todo el poder posible para defender la familia natural formada por un hombre y una mujer». Para ello ha decidido eliminar de los documentos oficiales la palabra «progenitor 1» y «progenitor 2» para poner «madre» y «padre» ya que según él «la familia natural está basada en la unión entre un hombre y una mujer»
Para muchos puede parecer una tontería. Pero no lo es. Sin lugar a dudas, es un paso a atrás en la conquista de derechos por parte del colectivo LGTBI.
Parece que el Ministro italiano es incapaz de dar una rueda de prensa sin encender una bomba. También quiso dejar clara su postura respecto a la inmigración afirmando que «Una inmigración bajo control garantiza los derechos de los italianos y de los inmigrantes. La inmigración de los últimos años traía caos, racismo y enfrentamientos sociales. El único antídoto contra el racismo (…) es respetar las leyes, las reglas y controlar a quien sale y entra del país».
El Gobierno italiano está dejando clara la nueva línea política del ejecutivo. Con tendencia conservadora y antieuropeísta habrá que seguir viendo que nuevas sorpresas tienen guardadas para el colectivo LGTBI a lo largo de la legislatura.