No teníamos muchos datos sobre las supuestas bodas privadas que se realizaban entre parejas LGTBI antes de que fuera legal hacerlo en EE.UU. Hasta ahora. Acaban de conocerse unas maravillosas fotos de 1957 que revelan que sí se celebraron bodas gays al margen de la ley.
Estas fotos tienen mucha historia. Tras realizar una boda gay y clandestina, la pareja llevó a revelar el carrete después de inmortalizar el enlace. Pero los novios nunca llegaron a ver las fotografías que hoy ven la luz, pues nunca se las entregaron a sus protagonistas.
Productores y escritores homosexuales están ahora investigando a fondo todo sobre estas imágenes con la intención de identificar a los novios, y así descubrir la razón por la que el empleado del laboratorio de fotografía no dio los retratos a los cónyuges, sus dueños.
La historia es digna de novelar, los investigadores aseguran: «Estamos revisando debajo de cada piedra, entrevistando a docenas de personas en el área de Filadelfia y fuera de ella, y consultando con investigadores, historiadores y expertos en muchos campos diferentes», aseguran.
Las fotos han llegado hasta hoy gracias a un visionario coleccionista que las guardó como si de un tesoro se tratase, tras conseguirlas en una subasta en internet. Cuando se dio cuenta del valor de lo que tenía en su poder, las donó a los Archivos ONE de la Bibliotecas de la Universidad del Sur de California y los Archivos Wilcox de Filadelfia.
Wolfe y sus socios, el director de cine PJ Palmer y el escritor y productor de televisión Neal Baer han hablado acerca del trabajo que están llevando a cabo: «Estamos recuperando historias increíbles e importantes de todo tipo, así como una parte de la historia gay que ha sido enterrada» asegura Palmer.
«Hay una historia muy rica que ha sido suprimida. Ojalá desde niño hubiera visto fotos de un matrimonio como este. Me habría hecho sentir más normal, al saber que estaba bien». Agrega el cineasta.
«Es importante recordar que las personas encontraban maneras de vivir sus vidas en silencio, lejos de las miradas indiscretas del mundo heterosexual». Son las palabras de Eric Marcus, presentador de podcast Making Gay History.
Según los investigadores, la pareja rondaría en este momento los 80 o 90 años, en el caso de que siguieran con vida. Hay que tener en cuenta que la boda se celebró 12 años antes de los disturbios de Stonewall, para hacernos una idea de la realidad social en la que vivían.
Wolfe asegura: «Estamos hablando de una generación de personas que fueron diezmadas por el sida. Hay muchas personas desaparecidas que, de no ser así, habrían facilitado nuestra búsqueda». Aún así han pedido por redes sociales que se les proporcione cualquier detalle que pueda arrojar luz sobre la identidad de la pareja, les sería de gran ayuda para llevar a cabo su proyecto.