La youtuber Penélope Guerrero subió ayer un nuevo vídeo a su canal junto a Edu, su novio, para denunciar públicamente la agresión homófoba que sufrió este último hace una semana en Barcelona.
Penélope cedía la palabra a su novio para que explicase él mismo lo sucedido aquella noche. Al parecer, la agresión tuvo lugar en su propio barrio, cuando Edu volvía a casa tras haber salido de fiesta con sus amigos. Cuando estaba a punto de entrar en su vivienda, dos chicos y una chica se acercaron para preguntarle si tenía tabaco. Edu les dijo que no y, al darse la vuelta, estos saltaron sobre él y le atacaron por la espalda.
El chico describe la agresión como algo premeditado, y asegura que el hecho de que le pidiesen tabaco tan solo fue una excusa para acercarse a él y comenzar a pegarle. Según sus palabras, entre todos le propinaron varios golpes en la espalda y la cara mientras gritaban «maricón hijo de puta» y «por maricón te vamos a pegar».
Afortunadamente, no tardó en pasar por allí un vecino que reconoció a Edu y llamó a una ambulancia. Sus agresores salieron corriendo, y lo dejaron sangrando en medio de la calle. No mostraron interés en robar ninguna de sus pertenencias, que habían quedado esparcidas por el suelo; tal y como el chico asegura, solo querían pegarle porque creían que era homosexual.
Tras el ataque, Edu no lo dudó un instante y fue a poner la denuncia, para lo cual tuvo que esperar más de seis horas de cola en la comisaría. También buscó la ayuda del colectivo LGTBI y denunció por segunda vez lo sucedido en la oficina de discriminación. El chico describe el apoyo que recibió allí como «una ayuda increíble, tanto psicológica como judicial», y anima a todo el mundo a pedir su protección en caso de sufrir cualquier tipo de discriminación.
https://www.youtube.com/watch?v=i2C0oB_hH44&feature=youtu.be
La pareja concluye el vídeo con la explicación del objetivo que buscaban al publicarlo: visibilizar este tipo de agresiones, ya no solo para concienciar de que suceden con mayor frecuencia cada día, sino para hacer saber a las víctimas que tienen derecho a defenderse y pedir justicia. «Siempre hay que denunciar, siempre», decía Edu.
También hacen hincapié en aclarar que, aunque ataques como este tengan lugar cada día, no hay que normalizarlos ni aceptarlos, y piden la unión de todas aquellas personas que en algún momento de su vida se hayan visto afectadas por un caso de discriminación, ya sea homófobo, racista, machista… Aseguran que solo así se podrán lograr avances en la lucha contra la desigualdad.