Acudió con una estola arcoíris

Temas: Homofobia, Pedro Zerolo, Política

Durante el homenaje a Pedro Zerolo en la Iglesia de San Antón, el padre Ángel García Rodríguez fue el encargado de oficiar un acto en su memoria. El padre quiso permitir la intevención de un pastor protestante que vestía una estola con la bandera del arcoíris, que simbolizaba el activismo LGTB del malogrado político canario.

Pero el Arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ha puesto el grito en el cielo. Dice que es una vergüenza permitir la presencia de un pastor protestante en la iglesia, y que además, tiene el descaro de llevar puesta una bandera gay como estola. Osoro ha emitido un comunicado en el que le dice al padre Ángel que “la iglesia es para la oración y para la celebración de los misterios del Señor, no para hacer manifestaciones ideológicas o políticas”.

Por su parte, el padre Ángel, que quiso recordar en su ceremonia la lucha de Zerolo por la igualdad de las personas LGTB y que no tuvo reparos en hablar de homosexualidad, ha contestado de este modo a las acusaciones: “Han entendido como un acto político lo que era una oración por un amigo”, y ha afirmado que no hubo nada ofensivo en el rezo y su forma de recordar a Pedro Zerolo. Defiende que fue un acto en su memoria y que no hubo consignas políticas durante el acto.

El fundador de Mensajeros de la Paz, el padre Ángel, encargado de la Iglesia de San Antón, ya ha hablado por teléfono con Osoro, quien le ha reiterado que tenga cuidado con este tipo de actos.

Pero el padre insiste en que seguirá rezando por todos: “San Antón va a seguir abierta, y seguiremos rezando por los amigos y por quienes no lo son. Y si la cierran será problema de quien tome esa decisión”.

En esta oración por Pedro Zerolo estuvieron presentes miembros de la Federación Estatal de Gays, Lesbianas, Transexuales y Bisexuales, representantes de diversas organizaciones LGTB y políticos como Ángel Gabilondo o Antonio Miguel Carmona.

“Volvería a hacer lo mismo si me lo pidieran las asociaciones de gays y lesbianas. Y con el permiso de Manuela Carmena lo haría en la Plaza de Colón”, sostiene el padre Ángel, que dice no arrepentirse de su decisión.

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