EL DISCO DEL MOMENTO
DUA LIPA – “DUA LIPA” (WARNER MUSIC)
Su principal reto, ya que desde que sedujo a propios y extraños con su poderosa voz en Thinkin’ Bout You aseguró que iba a apostar por el formato álbum, era lograr que su debut estuviese a la altura de los magníficos singles con los que se ha dado a conocer. Lo logra, pero justito. Genesis es un arranque muy prometedor, con un punto de grandilocuencia emocional que le va que ni pintado a Dua Lipa, a la que hemos entrevistado. La cabra tira al monte, y queda claro que cuando se deja llevar por los ritmos negroides que tanto le gustan, el disco sube enteros. Como en IDGAF y, sobre todo, en New Rules, la gran joyita entre los temas inéditos del álbum.
En cuanto a los medios tiempos y baladas, destaca No Goodbyes, el único de este lote con verdadero punch, y en el que no habría desentonado Sean Paul, porque parece un spin off de No Lie. Y es que en el disco hay diversas variaciones sobre sonidos que ya asociamos a ella, Begging, por ejemplo, es prima hermana de Hotter Than Hell.
Quizá sea la manera de asentar un estilo que asociemos definitivamente a ella y que le haga distanciarse de otras artistas con las que se la sigue relacionando, ya que Tove Lo, Alessia Cara o incluso Bebe Rexha juegan a incluir un punto de tormento en su feminista concepción del pop. El tímido cierre con Homesick, donde predomina una fragilidad impropia de ella, es lo que más descoloca. ¿Quizá a propósito? Habrá que esperar a próximas entregas para saberlo. ★★★
PARA AMANTES DE DIVAS DE TODO TIPO A RECUPERAR
SUSANA ESTRADA – “THE SEXADELIC DISC-FUNK SOUND…” (ESPACIAL DISCOS)
A finales de los 70 se consagró como musa del destape, y por su descaro inmortalizado en el cine se la recuerda. Pocos saben de su carrera musical paralela, que ahora se reivindica con un disco que es más que un lanzamiento irónico-kitsch calenturiento. Nos redescubre pegadizos y bailables temas en clave disco-funk con letras de alto voltaje sexual que pueden servir de inspiración a más de una travesti. Y ojo, que no estaría de más que en sesiones filogays se recuperasen canciones como Machos, con un subtexto y unos coros impagables. “¿Dónde está la libertad? Todos la quieren matar”, canta en Lograremos volar. Y es que este álbum, con la perspectiva del tiempo, se puede entender también como un ejercicio de liberación que nos recuerda que en las pistas de baile siempre se ha ejercido el activismo. ★★★★
JOCELYN BROWN – “JOCELYN BROWN” (BACCI BROS)
De cuando en cuando, esta infatigable diva vive un nuevo renacer. Y está muy bien que la intérprete de la inmortal Somebody Else’s Guy vuelva a la palestra, no solo para que quienes la siguen se vuelvan a deslumbrar con su chorro de voz sino para que las nuevas generaciones descubran a una de las reinas de la música disco y del soulful house. Coincidiendo con la temporada del Orgullo –actúa en más de uno– lanza este recopilatorio en el que recoge, además de su tema más emblemático, colaboraciones recientes con Oliver Cheatman, Hardage o los italianos Ben Hur. Incluye también canciones que permiten descubrir un registro más cercano al góspel de una voz tan versátil como emocionante. ★★★★
PARA AMANTES DE ARTISTAS QUE DESAFÍAN ESTEREOTIPOS
MARIKA HACKMAN – “I’M NOT YOUR MAN” (CAROLINE/MUSIC AS USUAL)
El chute de autoestima con que se ha enfrentado a su segundo álbum le ha sentado de maravilla. Si en su debut, mucho más anclado en el folk, lo suyo era asociarla a artistas como Laura Marling, ahora se acerca más a Tegan and Sara. No solo porque compartan sensibilidad queer y tanto las canadienses como la británica hayan firmado una canción titulada Boyfriend con madera de hit. Hackman apuesta por un pop más directo, con una voz rotunda, mayor versatilidad en su espíritu indie y una sinceridad que le permite firmar canciones tan sugerentes y explícitamente lésbicas como Violet. Un gran paso adelante. ★★★★
PERFUME GENIUS – “NO SHAPE” (MATADOR/POPSTOCK!)
Habrá quien pueda confundir su voz por la de Anohni en temas como Just Like Love. Pero Perfume Genius hace mucho que encontró su propia voz, y en este cuarto álbum consolida un sonido rotundo que le da mayor prestancia como intérprete. El toque andrógino con el que envuelve su voz choca en esta ocasión con arreglos grandilocuentes, de un dramatismo exacerbado, y No Shape arrebata. Sin duda, su aproximación al croonerismo desde una perspectiva abiertamente gay es tan original como intensa, y su manera de combinar en la producción lo orgánico, lo electrónico y lo orquestal es impecable. ★★★★
CUPCAKKE – “QUEEN ELIZABITCH” (CUPCAKKE)
Imposible que no te venga a la mente Lil’ Kim cuando ves a la rapera de Chicago en la portada de su nuevo disco. Lo cierto es que la autora de ese himno a reivindicar que es LGBT tiene mucho en común con la pequeña gran diva del hip-hop. Como aquella, Cupcakke desafía prejuicios relacionados con el físico y el género, se empodera todo el rato mientras te hace bailar y, de paso, te suelta sin ningún tipo de pudor consignas erótico-festivas. Se cuelan ramalazos de tropical y de reguetón en su singular apropiación de los topicazos del hip-hop, aquí reconvertidos en celebración feminista de una ‘papi chula’ (así se denomina en Cumshot) muy cañera y necesaria. ★★★ 1/2
CINTIA LUND – “NEW YORK ANTHEM” (SUBTERFUGE)
La sueco-española debuta con un canto de amor a la ciudad que la hechizó, y donde parece que le poseyó el espíritu de la Velvet Underground. Este primer disco resulta ante todo reposado y armónico, y nos descubre a una artista con una capacidad muy interesante para modular el magnetismo que genera a su antojo. A su favor juega también que New York Anthem no suene a mero ejercicio de estilo bien resuelto, sino a enigmática y melódica carta de presentación. ★★★ 1/2
PARA FANS DE ARTISTAS DE LARGA TRAYECTORIA
ERASURE – “WORLD BE GONE” (MUTE/PIAS IBERIA)
Está claro que hay dúos excepcionales de pop electrónico con un activista punto filogay que saben sobreponerse con gran dignidad a las tendencias. Fíjate aquí en Fangoria, y en el Reino Unido en Erasure. Hace décadas que Vince Clarke y Andy Bell sellaron su sonido, que apenas ha variado desde los 80. Lo que sí ha cambiado es el fondo de su música. Porque aquí, hasta sus habituales himnos bailables petardo-románticos, como Love You To The Sky, están teñidos de activismo. Y el tono soulero de la voz de Bell aparece en ocasiones quebrado, como en A Bitter Parting, y ese punto melodramático le da una intensidad inédita a Erasure. ★★★
SAINT ETIENNE – “HOME COUNTIES” (SAINT ETIENNE LTD/PIAS IBERIA)
Nunca el extrarradio sonó tan glamuroso (véase What Kind of World). Es lo que tienen Saint Etienne, que a estas alturas ni se reinventan, se reciclan. En su nuevo álbum conceptual, con historias de barrio, juegan sus bazas habituales. Ya que el factor sorpresa no cuenta –suenan 100% a ellos, combinando referencias francesas 70’s, pop clásico 60’s y dance pop 90’s–, se agradece que el conjunto les haya quedado tan sólido. ★★★
SHAKIRA – “EL DORADO” (SONY MUSIC)
Ambicioso título para un disco que no está a la altura, porque ambición artística desprende poca. Los mismos bandazos que ha dado en sus últimos singles –de éxito incontestable– los da en esta especie de recopilatorio extendido. Una selección discutible de dúos en que confirma su química con Maluma y la escasa chispa que surge con, por ejemplo, Nicky Jam. ¿Por qué tan pocos temas, y tan olvidables, solo de Shakira? No transmite mucha fe en su Dorado. ★★