Tu casa es, sin duda, el escenario de tu vida. Es dónde vives, y refleja mejor que nada (ni nadie) quién eres. También cómo te quieres mostrar a los demás. En este reportaje hemos mezclado la decoración con la moda. Para ello hemos fotografiado a Fernando Ojeda, que es el mejor reflejo de lo que es ser un gentleman en pleno siglo XXI, en la casa del interiorista y arquitecto Alberto Cubo. Shangay Home –nuestra nueva cabecera, dedicada íntegramente a la decoración– ha sido la disculpa para este maridaje perfecto.
Tu casa es, también, cómo te quieres mostrar a los demás. La clave está en sacar el mayor provecho al espacio, adecuando las tendencias a tu personalidad y tu presupuesto… Por ello, Alberto Cubo nos da los trucos para sacarle todo el partido.
Tras sus estudios de arquitectura en la Politécnica de Madrid, Alberto Cubo se especializó en el diseño de interiores en la Universidad Complutense. Dirige la empresa de interiorismo Solucionista. Nos abre su casa para Shangay Home y en ella posa el empresario e influencer Fernando Ojeda para darte las claves deco que necesitas para poder sacar el máximo partido a tu vivienda.
Jersey: Cavalli / Pantalón: Wrangler / Calzado: Abarcas Menorquinas Mibo.
¿Quién es Fernando Ojeda? Pues, sin duda, tal y como hemos dicho, representa el prototipo del gentleman moderno, del siglo XXI. Por ello lo escogimos como modelo para combinar moda y decoración en este reportaje. Es uno de los influencers más deseados de nuestro país por las marcas de lujo. El empresario tiene 70.000 seguidores en Instagram. Su cuenta es todo un manual de estilo para quienes quieran combinar la exquisitez de lo clásico con las últimas tendencias.
Alberto Cubo elige los sitios de su casa para que Fernando pose y nos cuenta las claves deco. Desde Solucionista, su empresa de interiorismo lleva años sacándole todo el partido a las casas. Estos son sus trucos.
FOTOS FERNANDO OJEDA Y ALBERTO CUBO: DANNIEL ROJAS
FOTOS INTERIORISMO: ASIER RUA y JUAN BARAJA
ESTILISMO: JORGE GONZÁLEZ
MAQUILLAJE Y PELO: DAVID DEIBIS
Eclecticismo
Pantalón: Docker’s / Camisa: Antony Morato.
Hay un principio básico: siempre hay que respetar la personalidad de la arquitectura en la que estás interviniendo. “La puesta en valor de los materiales tradicionales existentes, cuando existen. Cada vivienda tiene su genius loci [que traducido del latín significa ‘el genio del lugar’], una deidad romana que cuidaba a los habitantes de la casa. Traído a nuestros días, significa el respeto a la esencia de la arquitectura local”, nos dice Alberto Cubo.
Ello no impide ni entra en contradicción con que el eclecticismo sea una de las claves para hacer, de verdad, que tu casa sea ‘tuya’: “La mezcla de algunas piezas de valor sentimental en tu vida, con otras de diseñadores conocidos de distintas épocas, antigüedades y objetos tradicionales o típicos del lugar en el que vives es fundamental para crear un espacio sofisticado, siempre que se sepa valorar el equilibrio y el diálogo entre los distintos muebles elegidos para cada estancia”.
Pero vayamos a cosas concretas: “Por ejemplo, el mobiliario italiano de los años cincuenta o sesenta –con diseñadores como Ico Parisi o Gio Ponti– mezclado con muebles contemporáneos y piezas de artesanos locales… Todo ello puede ‘maridar’ perfectamente con el art decò o el Biedermeier. Eso sí, hay que tener en cuenta que las piezas importantes tienen que poder respirar para darle la relevancia que merecen, estar en la ubicación adecuada y tener el protagonismo que les corresponde. La correcta iluminación también es algo básico para ello. Otras piezas de menor valor pueden estar a su alrededor, siendo el complemento perfecto para lograr un conjunto armónico.
Todo ello sin renunciar a la funcionalidad tan necesaria en el día a día, pues no olvidemos que estamos hablando de tu casa. Y las casas hechas para compartirlas, sí, pero, sobre todo, para vivirlas. Funcionalidad y estética deben ir, siempre, de la mano. Algo que muchos profesionales olvidan. Partiendo del gusto y las necesidades del cliente, nosotros tenemos que conseguir que se encuentre siempre cómodo, dentro de nuestro proyecto con nuestra particular seña de identidad. Procuramos adaptar los espacios poniendo el foco en las calidades y en el mimo por los detalles”.
Color
Bomber: Dsquared2 / Pantalón: Karl Lagerfield /Deportivas: Trosnisco para Masaltos.com
Alberto apuesta por la mezcla de color, “pero siempre respetando una ergonomía cromática: el ojo no se tiene que cansar al recorrer la estancia, pero tampoco acostumbrarse; siempre debe sorprenderse, pero sin llegar al agotamiento. No hay una norma fija para conseguirlo, pero como guía nos puede servir la ‘regla del 60/30/10”.
¿Qué quiere decir esto? “Pues que un color sea el predominante, que es el que va al 60 por ciento; otro, complementario o acorde al 30; y ‘toques locos’, positivos, alegres, al 10”.
Para él no existen los colores neutros: “Todos transmiten algo, siempre. Si alguien elige una gama de grises o tierra para su vivienda es porque se quiere rodear de sosiego, tranquilidad… Cada tono, por muy sutil que pueda parecer la diferencia, provoca un estado de ánimo determinado. Además, hay que tener en cuenta que cada persona tiene una percepción distinta del color, por lo que si se aplican en distintas texturas o materiales aumenta aún más esta diferenciación”.
Conjunto: Dsquared2
La importancia de la luz
Bañador: Aussiebum
El sol es vida. Y a veces no sabemos sacarle todo el partido y sus beneficios: “Una luz norte es muy adecuada para la ubicación en una casa de la zona de lectura o trabajo, porque es clara, pero difusa. Las estancias con iluminación sur son las ideales para los ‘espacios vivideros’, como el salón o comedor, siempre con buenos elementos de control lumínico, como persianas, lamas, toldos, estores, vidrios con tecnología solar. Aquí es donde podemos jugar con los elementos característicos de cada zona o vivienda”.
En un estancia pequeña la orientación es clave: “Hay muchas viviendas protegidas, en los centros urbanos, en las que no se puede tocar la fachada. Pero en determinadas casas sí puede ser fundamental la apertura de nuevos huecos, o la ampliación de los ya existentes. Ello nos puede cambiar por completo la apreciación de los volúmenes y colores”.
Pero pongamos los pies en la tierra, tu casa es la que es, y muchas veces no se puede conseguir más de lo que entra por la ventana: “Por ello, una buena iluminación artificial es fundamental. Podemos hablar de tres niveles. Una ambiental general, adecuada al tipo de estancia, pues no es lo mismo una cocina, un pasillo o un salón. El segundo es la iluminación puntual, sobre una superficie de trabajo, una pieza de mobiliario u obras de arte. El tercero es la decorativa, con foseados perimetrales en el techo, bañadores embutidos en los muros o en el suelo, o la utilización de lo que podríamos llamar una ‘luz teatral’ para conseguir algún efecto dramático. Como consejo, siempre es preferible que no se vea la fuente o el foco, por lo que conviene ocultarlos en un falso techo, paredes o suelos”.
Pantalón: Intimissimi Uomo / Slip: Aussiebum / Reloj: Montblanc
Hay tres factores técnicos a tener en cuenta: “El índice de reproducción cromática, IRC, es la medida de una fuente luminosa para reproducir correctamente los colores. Por otro lado, la temperatura, que puede ser fría o cálida: para una vivienda lo correcto debe estar en torno a los 2.800/3.000K. La tercera sería la intensidad de la fuente, que está medida en candelas. Como profesional, y según la estancia que queramos iluminar, elijo los tipos de fuente y su combinación. El objetivo es conseguir un confort visual que será definitivo para que la estancia sea acogedora. Una iluminación incorrecta puede echar por tierra todo”.
El arte como protagonista
Total look: Roberto Verino
Para Alberto es fundamental en sus proyectos: “Muchas veces una estancia se puede organizar en torno a una gran pieza. Siempre intento destinar parte del presupuesto del proyecto para la adquisición de alguna obra. No es complicado economizar en alguna de las partidas de la reforma de la vivienda para ello. Apuesto siempre por artistas españoles de media carrera, profesionales que ya están el circuito del arte, pero que aún no se han internacionalizado. Hay que moverse por los gustos personales, no buscando la especulación, el pensar que lo que estás comprando se va a revalorizar, cosa que en ocasiones sucede. Lo importante es pensar que la vivienda es un espacio en el que te vas a levantar cada día, en el que vas a convivir con esas piezas. Además, te van a acompañar a lo largo de tu vida, incluso si cambias de vivienda, o de mobiliario en esa misma. Poco a poco, esa colección que vas creando será el reflejo de la evolución de tus gustos”.
El interiorista quiere que escapemos de miedos y tópicos que asocian el mundo del arte al del lujo inaccesible: “Bien asesorados se pueden conseguir cosas de gran calidad, a muy buenos precios”. Aunque el objetivo de los artistas es otro, no debemos olvidar que también cumplen con una función decorativa: “Pueden ser una buena herramienta para la introducción del color en nuestros espacios. Tengo muy claro que el arte siempre tiene una intención que va más allá de lo decorativo. Pero también soy consciente del partido que se le puede sacar a la hora de vestir una estancia. Tengo mis artistas fetiche, a los que siempre me gusta recurrir en mis proyectos por las emociones que despiertan tanto en mí como en mis clientes. Estas fotos son un claro ejemplo de ello, con cuadros de Maíllo, Santiago Giralda, Ydáñez, Sonia Navaro y Garcinuño; esculturas de Lagares, Guillermo Mora y Canogar o fotografías de Germán Gómez o Irene Grau. He visto como muchos clientes se han ‘enganchado’ a este mundo a partir de un proyecto. Pasado el tiempo siguen recurriendo a mi consejo para adquirir nuevas piezas. Esta fusión de decoración con arte es, sin duda, una de mis señas de identidad”.